Un grave caso de inseguridad empañó el turismo en Cartagena el pasado fin de semana, cuando una pareja de visitantes mexicanos fue retenida e intimidada en la Isla Tierra Bomba y obligada a pagar 1,8 millones de pesos por servicios que no habían solicitado.
De acuerdo con la denuncia, el cobro se realizó mediante un datáfono a nombre de Deportes Náuticos Delson, mientras los turistas eran rodeados por varias personas, una de ellas armada con un palo. La pareja aseguró que se sintió secuestrada bajo la amenaza de no ser llevada de regreso a tierra firme si no accedía al pago.
Gracias a la intervención del oficial de Policía Carlos Camargo, los visitantes lograron retornar a salvo a Cartagena. La afectada, Gretel Miranda, expresó su decepción: “Nos vamos con un mal sabor de boca. Le pedimos a las autoridades que revisen los videos y a todos los involucrados para que se haga justicia”.
El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, confirmó en sus redes sociales que los estafadores fueron identificados, capturados y puestos a disposición de la Fiscalía.
“Una vez conocido el caso, actuamos inmediatamente a través de nuestra Secretaría de Turismo y la Policía de Cartagena. Aquí en Cartagena los estafadores no tienen cabida. Los turistas afectados tienen toda la asistencia y respaldo de la Alcaldía”, afirmó el mandatario.
Las autoridades continúan la investigación para establecer si existen más casos relacionados con este tipo de prácticas que ponen en riesgo la seguridad y la imagen turística de la ciudad.
