Al menos 61 personas han muerto este miércoles en la madrugada por las inundaciones en la provincia de Valencia, en la costa este de España.
Según los reportes locales, la lluvia equivalente a un año de precipitaciones cayó sobre la ciudad de Chiva, cerca de Valencia, lo que provocó una serie de fuertes inundaciones de barro y agua en varias localidades cercanas.
Las autoridades además han reportado decenas de desaparecidos.
El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, dijo este miércoles que la emergencia continuaba.
«Aún no podemos dar por concluido este devastador episodio. Pido a quienes allí residen que extremen las precauciones», dijo.
También señaló que «no abandonará» a las víctimas afectadas por las inundaciones.
Por su parte, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, señaló que «Europa está dispuesta a ayudar» tras lo que llama las «consecuencias catastróficas» de las inundaciones en la costa sur y este de España.
En una declaración en la red social X, expresó su solidaridad con todos los afectados y dice estar agradecida a los socorristas «que están haciendo todo lo posible para ayudar a las personas necesitadas».
Debido a las fuertes lluvias, las más fuertes en casi un siglo de acuerdo a las autoridades, muchas personas pasaron la noche encima de sus autos esperando ser rescatadas.
El gobierno central informó que los trenes y vuelos se han visto gravemente afectados, con cancelaciones generalizadas. y además, se han desplegado 1.000 efectivos para ayudar en la operación de rescate.
