Fuentes de inteligencia revelaron que agentes iraníes, presuntamente vinculados al grupo terrorista Hezbolá y a las Fuerzas Quds, estarían entrenando a grupos armados colombianos en el uso de drones especializados para acciones terroristas.
Según la información, estos operativos se llevarían a cabo en zonas remotas del país, donde se les enseñaría a manejar aeronaves no tripuladas más potentes, con capacidad para realizar ataques de alto impacto.
La revelación de este entrenamiento en Colombia surge tras el reciente intento de ingreso de seis ciudadanos iraníes con pasaportes falsos, quienes fueron detenidos en la semana pasada por autoridades migratorias colombianas. Los individuos, provenientes de Brasil y Venezuela, pretendían usar a Colombia como un «puente» para llegar a Centroamérica, pero sus documentos fraudulentos activaron las alertas de las autoridades locales.
Posible vinculación con Hezbolá y las disidencias de las Farc
De acuerdo con fuentes cercanas a los servicios de inteligencia, este incidente no sería un hecho aislado, sino parte de un patrón de actividad sospechosa que apunta a una mayor presencia de actores iraníes en territorio colombiano. Se ha identificado que los agentes iraníes, supuestamente vinculados a Hezbolá y las Fuerzas Quds, están colaborando estrechamente con grupos armados en Colombia, particularmente con las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), con el fin de entrenarlos en el manejo de nuevas tecnologías, como los drones.
Esta cooperación se habría intensificado en los últimos meses, lo que preocupa a las autoridades nacionales e internacionales, dado que los drones no solo tienen un uso de vigilancia, sino que también podrían ser utilizados para lanzar ataques contra objetivos estratégicos en Colombia y otras regiones de América Latina.
Un «puente» de tránsito para actividades ilegales
El hecho de que los ciudadanos iraníes intentaran ingresar a Colombia con documentos falsificados genera inquietud en torno a la creciente presencia de agentes extranjeros en la región. Según información de Migración Colombia, los iraníes tenían la intención de continuar su viaje hacia Centroamérica, pasando por territorio colombiano como punto de tránsito. Sin embargo, su intento de burlar el sistema migratorio fue frustrado, y las autoridades detectaron irregularidades que llevaron a su inadmisión.
Las fuentes de inteligencia no han descartado que este tipo de incidentes puedan ser parte de una estrategia más amplia que involucra el uso de Colombia como centro logístico para la capacitación de grupos armados en técnicas avanzadas de guerra no convencional.
Implicaciones geopolíticas y regionales
El involucramiento de actores como Hezbolá y las Fuerzas Quds en Colombia también tiene implicaciones geopolíticas, ya que estos grupos han sido asociados con actividades terroristas internacionales y con la expansión de la influencia iraní en América Latina. Para las autoridades colombianas, la presencia de estos grupos y la posible cooperación con organizaciones armadas locales abre nuevos frentes en la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo.
En respuesta, las autoridades colombianas han aumentado las medidas de control fronterizo y han intensificado las operaciones de inteligencia, con el apoyo de aliados internacionales, para frenar la infiltración de estos grupos en el país.
Esta situación refleja la creciente preocupación sobre la internacionalización de los conflictos en Colombia, donde actores externos, con intereses geopolíticos y económicos, buscan tomar ventaja de las estructuras criminales locales para fortalecer sus redes ilícitas. Las investigaciones siguen en marcha, y se espera que en las próximas semanas se den más detalles sobre la extensión de esta red de colaboración internacional en el país.
