¿Tráfico de influencias?, lo cierto es que genera todo tipo de dudas sobre posibles irregularidades
Un escándalo de corrupción ha puesto bajo la lupa a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), con el involucramiento de Santiago Rafael Alcocer Vélez, primo de la primera dama, Verónica Alcocer.
El nombre de Alcocer Vélez ha sido vinculado a la compra de 40 camiones cisterna a un precio total de 29 mil millones de pesos, una transacción que está siendo investigada por las autoridades debido a su elevado costo y las presuntas irregularidades en el proceso.
Santiago Alcocer Vélez, director de la concesionaria Country Motors S.A., que participó en la venta de los vehículos a la Ungrd, es señalado de estar vinculado a esta operación a través de su empresa Alquep SAS, que posee una parte significativa de las acciones de Country Motors. Las investigaciones de la Fiscalía y la Procuraduría han puesto foco en los contratos firmados con la empresa Impoamericana Roger SAS, la cual se encargó de la transacción de los camiones a la Ungrd.
De acuerdo con la denuncia, el costo de los camiones cisterna, que superó los 29 mil millones de pesos, ha sido motivo de cuestionamiento, ya que se considera excesivo en relación con el valor de mercado de los vehículos. Además, se descubrió que la Corporación Conjunta para la Sostenibilidad y el Desarrollo Integral con Yapurutú, creada en 2019 y vinculada a un ex político, fue la entidad encargada de gestionar la compra, lo que ha generado aún más sospechas sobre el proceso.
El portavoz de Country Motors negó cualquier influencia de la primera dama, Verónica Alcocer, en la negociación, asegurando que la empresa opera de manera independiente y que la relación familiar con la primera dama no tuvo impacto en las operaciones comerciales. Según el portavoz, el contrato fue gestionado por la firma Yapurutú, que solicitó una cotización para los camiones a través de Country Motors y Colmotores, quien ofreció un precio especial por tratarse de una entidad pública.
Sin embargo, la relación entre Santiago Alcocer Vélez y Verónica Alcocer ha sido objeto de especulación, dada la cercanía familiar y el hecho de que ambos provienen de un mismo entorno político y empresarial. La primera dama, por su parte, ha rechazado cualquier intento de vincularla al caso y denunció, en junio, una campaña de difamación en su contra, argumentando que había sido blanco de un complot.
Mientras tanto, en La Guajira, donde la compra de los camiones cisterna debería haber tenido un impacto positivo en la crisis hídrica, se ha desatado una protesta simbólica por parte de las víctimas de esta crisis. 40 carrotanques de juguete han sido regalados como una denuncia contra la corrupción de la Ungrd, especialmente debido a la falta de funcionamiento de los camiones y el desvío de recursos destinados a mitigar la emergencia en la región.
El abogado de las víctimas, Pablo Bustos, señaló que este acto de protesta busca visibilizar la corrupción y el desfalco de recursos en los contratos de distribución de agua. Las autoridades continúan investigando las irregularidades en los contratos y la posible implicación de funcionarios de la Ungrd, como Olmedo López y Sneyder Pinilla, en el manejo fraudulento de los fondos destinados a la compra de los camiones cisterna.
La investigación sigue su curso y la comunidad permanece expectante ante los posibles avances que puedan arrojar más detalles sobre las irregularidades que rodean este escandaloso caso.
Próxima entrega: La compra de los otros carrotanques marca DAF y la vinculación de Nicolás Petro con un importador de Medellín.