La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha proyectado un «crecimiento moderado» de la economía colombiana del 1,8% para 2024, con un repunte más pronunciado en los años siguientes, alcanzando un 2,7% en 2025 y un 2,9% en 2026. Aunque estas cifras reflejan una mejora respecto al 0,6% de crecimiento registrado en 2023, siguen estando por debajo de los niveles alcanzados antes de la pandemia.
El informe semestral de la OCDE señala que, tras el bajo desempeño de la economía colombiana en 2023, se espera una recuperación paulatina hacia una tasa de crecimiento más cercana a su potencial, que rondaría el 3% en 2025 y 2026. La proyección para 2024 es superior al 1,2% estimado en el informe anterior, pero inferior al 3,3% que la organización había pronosticado para 2025 en su informe previo.
El documento destaca que la inversión se recuperará gradualmente a medida que las condiciones financieras se relajen, aunque continuará por debajo de los niveles prepandemia debido a la incertidumbre económica. El consumo también experimentará un crecimiento moderado, respaldado por la fortaleza del mercado laboral, mientras que las exportaciones se mantendrán en niveles sólidos.
En cuanto a la inflación, la OCDE prevé una disminución lenta hacia el objetivo del 3% para finales de 2026, tras una tasa interanual del 5,41% en octubre de 2023, una leve disminución respecto al mes anterior.
Uno de los principales riesgos identificados para la economía colombiana es el aumento del déficit fiscal y de la cuenta corriente, lo que limita el margen para enfrentar posibles adversidades. Por ello, la OCDE recomienda mantener una política fiscal prudente para asegurar la sostenibilidad de la deuda y continuar con la consolidación fiscal.
Asimismo, la OCDE señala que la tasa de interés, que se encontraba en el 9,75% en noviembre de 2023, sigue siendo elevada. A pesar de que el Banco de la República comenzó a reducir los tipos de interés en diciembre, la organización subraya que la flexibilización de la política monetaria debe llevarse a cabo con cautela debido a los altos déficit fiscales y de cuenta corriente.
Finalmente, el informe sugiere que Colombia debe implementar una reforma tributaria integral y reducir los gastos tributarios para reequilibrar la carga fiscal y mejorar la eficiencia del sistema tributario.