La comunidad del barrio 7 de Abril, en el suroccidente de Barranquilla, mostró una vez más su alerta y vigilancia ante la delincuencia, al capturar a un sujeto que presuntamente intentaba cometer un hurto en el sector.
El hecho ocurrió en la madrugada de este miércoles 13 de noviembre, cuando los residentes, al notar el intento de robo, no dudaron en actuar y someter al presunto ladrón, dándole una intensa dosis de “paloterapia” antes de entregarlo a las autoridades.
Según los testimonios de los habitantes del barrio, el sujeto fue visto en actitud sospechosa rondando las viviendas y aparentemente intentando robar a un ciudadano, pero la rápida intervención de los moradores, quienes actuaron al instante, permitió que el individuo fuera capturado antes de que pudiera consumar el robo. Sin embargo, la situación no terminó ahí. La “paloterapia” —como algunos vecinos la denominaron— fue la respuesta de la comunidad ante la constante preocupación por la inseguridad en la zona. Golpes y agresiones fueron propinados al presunto ladrón antes de que lo entregaran a las autoridades.
La Policía Metropolitana de Barranquilla llegó al lugar minutos después y se hizo cargo de la situación. El sujeto aporreado fue detenido. Aunque el acusado no resultó gravemente herido, el incidente dejó claro el nivel de frustración de los vecinos ante los altos índices de delincuencia que afectan a muchos sectores de la ciudad, y su creciente desconfianza en la respuesta de las autoridades.
La comunidad del barrio 7 de Abril, al igual que muchos otros sectores de Barranquilla, ha denunciado en varias ocasiones la presencia de delincuentes en las horas más tempranas del día. El lema de muchos residentes, “Temprano es más bacano”, refleja su actitud de estar siempre alerta ante cualquier posible acto de delincuencia en su zona.
Las autoridades reiteraron su llamado a la denuncia y pidieron a los ciudadanos no tomar la justicia por sus propias manos. A pesar de la acción de la comunidad, el hecho resalta la creciente preocupación por la inseguridad en Barranquilla, y la necesidad de más esfuerzos conjuntos entre Policía y ciudadanos para combatir el crimen en las calles.