Por David Awad V.
El sur del Atlántico da un paso firme hacia el desarrollo sostenible con la creación de una Asociación Intermunicipal para el Desarrollo Sostenible del Embalse de ‘El Guájaro’, una iniciativa que une a los municipios de Manatí, Luruaco, Repelón y Sabanalarga en un esfuerzo conjunto para la conservación, rehabilitación y manejo adecuado de este vital recurso hídrico.
Con el respaldo de los Concejos municipales y las alcaldías de estas localidades, la asociación se erige como una respuesta al creciente desafío que enfrenta el Embalse de ‘El Guájaro’, considerado el más grande del Atlántico y el segundo en importancia en Colombia. El objetivo es asegurar un desarrollo sostenible que garantice un acceso responsable al agua y proteja este importante ecosistema, alineándose con las políticas del Gobierno Nacional que reconocen el agua como un factor clave para el progreso social, económico y ambiental del país.
Los desafíos del embalse de ‘El Guájaro’
El Embalse de ‘El Guájaro’ enfrenta serias dificultades que amenazan su capacidad de almacenamiento y sus funciones productivas. La sedimentación, la contaminación y el uso inadecuado del suelo han reducido su capacidad de almacenamiento en un 70%, lo que ha afectado tanto a la producción pesquera como a la agricultura local. Este embalse es crucial para el abastecimiento de agua potable, así como para las actividades agropecuarias y pesqueras en los municipios aledaños.
La situación se agrava con el pastoreo indiscriminado en las zonas destinadas a la pesca y la agricultura, lo que ha deteriorado aún más el ecosistema. Además, la contaminación del agua y la reducción de la biodiversidad están poniendo en riesgo la seguridad hídrica de la región.
Un proyecto para la recuperación del embalse
La propuesta para la recuperación del Embalse de ‘El Guájaro’ tiene como objetivo devolverle su capacidad de almacenamiento, que originalmente era de 400 millones de metros cúbicos de agua. Esto es fundamental para no solo mitigar las inundaciones en épocas de lluvia, sino también para garantizar el abastecimiento de agua para las comunidades cercanas, la agricultura y la pesca.
Entre las acciones previstas están:
- Limpieza y dragado del embalse para restaurar el flujo de agua y proteger los ecosistemas acuáticos.
- Restauración de infraestructuras clave como los diques de Villa Rosa y Polonia, que son esenciales para el control de las aguas y la prevención de inundaciones.
- Reforestación y recuperación de las zonas aledañas al embalse para fortalecer el ecosistema.
- Mejoramiento de las obras hidráulicas para evitar la contaminación de las aguas residuales provenientes de los municipios aledaños.
Innovación y aprovechamiento del lodo
Un aspecto destacado del plan de rehabilitación es el aprovechamiento del sedimento extraído del embalse para la producción de abonos orgánicos. Esta estrategia no solo contribuirá a la restauración ecológica del embalse, sino que generará una fuente adicional de ingresos para los agricultores locales, al convertir el lodo en un recurso útil para la agricultura.
El compromiso institucional y ciudadano
La implementación de este ambicioso proyecto ha contado con el firme respaldo de las autoridades locales y la comunidad, quienes han expresado su compromiso con la protección del embalse. Además, el Senado de la República ha aprobado recientemente proyectos legislativos que facilitan la distribución de recursos para financiar iniciativas regionales como esta, lo que abre la puerta a nuevas oportunidades de inversión en la región.
El futuro del embalse y la región
La rehabilitación del Embalse de ‘El Guájaro’ no solo es crucial para las comunidades que dependen de él, sino también para el desarrollo sostenible del Atlántico. Con la creación de esta Asociación Intermunicipal, los municipios de Manatí, Luruaco, Repelón y Sabanalarga podrán gestionar de manera conjunta el agua, asegurando su disponibilidad para las futuras generaciones.
La colaboración entre los diferentes niveles de gobierno y la participación activa de la comunidad son clave para el éxito de este proyecto, que tiene el potencial de recuperar el equilibrio ecológico del embalse y asegurar un futuro próspero y sostenible para el sur del Atlántico. El Embalse de ‘El Guájaro’ podrá recuperar su función como un recurso vital, beneficiando a todos aquellos que dependen de él para su supervivencia y desarrollo económico.