La noche del domingo fue escenario de un nuevo hecho de sangre en el municipio de Soledad, Atlántico. Javier Enrique Saume Padilla, de 53 años, conocido como “Bacoa”, fue asesinado a tiros mientras caminaba por una calle del barrio Las Gaviotas.
Según el reporte de las autoridades, el homicidio ocurrió aproximadamente a las 9:10 p.m., cuando la víctima fue abordada por dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta. Sin mediar palabra, uno de los atacantes desenfundó un arma de fuego y disparó en repetidas ocasiones contra Saume Padilla, quien cayó al suelo sin signos vitales.
El crimen se produjo en una zona señalada por las autoridades como área de injerencia del Grupo Delincuencial Común Organizado (GDCO) «Los Costeños», una estructura vinculada a extorsiones, tráfico de estupefacientes y otros delitos en el área metropolitana de Barranquilla.
Familiares de la víctima informaron a la Policía que Javier Enrique era consumidor habitual de sustancias psicoactivas, aunque desconocían si había recibido amenazas o si mantenía algún tipo de conflicto reciente. Las autoridades indicaron que el fallecido no presentaba antecedentes judiciales en el sistema SPOA.
Hasta el momento se desconocen los móviles del asesinato. Las autoridades manejan como hipótesis preliminar un posible ajuste de cuentas, y ya iniciaron labores investigativas para identificar y capturar a los responsables del crimen.
El cuerpo fue trasladado a Medicina Legal, mientras que personal del CTI de la Fiscalía y la Policía Judicial adelanta las diligencias pertinentes.
Con este nuevo homicidio, crece la preocupación entre los habitantes del municipio de Soledad por el incremento de la violencia y la presencia de estructuras criminales que siguen operando con alta capacidad de fuego e impunidad.