Más de 100 organizaciones de paz y derechos humanos, junto con víctimas del conflicto armado, enviaron una carta al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas solicitando que se mantenga el financiamiento, los recursos y el respaldo político a la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, considerada “esencial para el avance del acuerdo de paz firmado en 2016”.
El pronunciamiento se conoció horas antes de la votación sobre la extensión del mandato de la misión, en medio de la incertidumbre sobre su continuidad. La tensión creció luego de que el embajador de Estados Unidos ante la ONU, Michael Waltz, cuestionara el alcance del organismo y acusara al gobierno de Gustavo Petro de “socavar las posibilidades de una paz duradera”.
En la misiva, las organizaciones advirtieron que el papel de la ONU sigue siendo crucial para la implementación de los compromisos de paz, especialmente en zonas donde persisten la violencia y la presencia de grupos armados.
“Su apoyo a los diversos gobiernos colombianos es fundamental para garantizar el progreso en aspectos clave del acuerdo de 2016, como la reforma rural, la reintegración de excombatientes y la seguridad de comunidades y líderes sociales”, señala el documento, firmado por más de 180 personas.
El mensaje busca enviar una señal de respaldo internacional a la presencia de la ONU en el país, en momentos en que sectores políticos y diplomáticos debaten el rumbo del proceso de paz y los retos de su implementación.



 





