La crisis diplomática entre Colombia y Estados Unidos subió de tono este lunes luego de que varios ministros y altos funcionarios del Gobierno Petro perdieran o renunciaran a sus visas estadounidenses, en medio de la tensión generada por la revocatoria del documento al propio presidente.
La canciller Rosa Villavicencio fue la primera en anunciar su decisión:
«Si por ser pacifista te quitan la visa, muchos estamos diciendo que también lo somos y renunciamos a ese documento», afirmó al reconocer que las relaciones con Washington “están tensas”.
A su gesto se sumó el ministro de Hacienda, Germán Ávila Plazas, quien señaló en su cuenta de X: “Para trabajar por nuestro pueblo no necesitamos visa”.
Más tarde, la superintendente de Industria y Comercio y exministra Cielo Rusinque también presentó su renuncia al visado, criticando a Estados Unidos por actuar con “afán de dominación planetaria” y por intentar, según ella, “censurar a quienes denuncian el genocidio en Gaza”.
Por su parte, el ministro de Minas, Edwin Palma, reveló que Washington le canceló tanto la visa diplomática como la de turista. “Gaza bien vale una visa”, escribió en redes sociales.
La lista continuó con la directora del Dapre, Angie Rodríguez, quien recibió la notificación de revocatoria por parte de la embajada estadounidense en Bogotá.
El sábado, el secretario jurídico de la Presidencia, Augusto Ocampo, había marcado el precedente al entregar voluntariamente su visa, en solidaridad con el jefe de Estado.
Estados Unidos explicó la medida contra Petro acusándolo de instar a soldados norteamericanos a desobedecer órdenes e incitar a la violencia durante una manifestación propalestina en Nueva York, que coincidió con la presencia del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en la ONU.
El presidente colombiano, crítico férreo de Israel y defensor de la causa palestina, ya había roto relaciones diplomáticas con ese país en mayo de 2024.
Villavicencio recalcó que, pese a estas decisiones, Colombia seguirá firme en su “compromiso con los derechos humanos, la paz y la diplomacia multilateral”, recordando además que el país asumirá en enero un asiento como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.
