Tras horas de tensión, bloqueos y largas filas de vehículos bajo el inclemente sol, la vía de la Cordialidad vuelve a respirar.

El alcalde de Sabanalarga, José Elías Chams, confirmó que la movilidad ya fue restablecida en esta importante arteria vial que conecta al Atlántico con buena parte de la región Caribe.
El cierre, protagonizado por comunidades que salieron a manifestarse por causas aún no detalladas, paralizó el paso de carros particulares, buses intermunicipales y camiones de carga, dejando a cientos de viajeros varados y al comercio golpeado.
Sin embargo, el diálogo pudo más que la protesta. Gracias a conversaciones entre autoridades y líderes comunitarios, se logró un acuerdo que permitió levantar el bloqueo y restablecer el flujo vehicular.
“Seguimos comprometidos con el diálogo social y la búsqueda de soluciones pacíficas. Hacemos un llamado al respeto por las vías y al uso de canales institucionales”, indicó la administración municipal, que ya gestiona nuevas mesas de concertación para evitar futuros bloqueos.
La vía de la Cordialidad es clave para la economía y la conectividad de la región, por lo que cualquier interrupción genera efectos en cadena.
Por ahora, todo vuelve a la normalidad… aunque con la advertencia de que el descontento social sigue presente y que las autoridades tendrán que actuar más allá del levantamiento de barricadas.