Un nuevo ataque sicarial sacudió al barrio 7 de Abril, en la localidad Metropolitana de Barranquilla.
El hecho se registró en el sector conocido como Loma del Papi, parte trasera del Paso, en la zona de la Calle Ancha, donde un hombre fue asesinado a tiros en la vía pública.
Con este crimen, el número de muertes violentas en lo que va del mes de agosto de 2025 asciende a 76 casos, según información recopilada por medios judiciales y analistas en seguridad. Barranquilla registra 42 de estas muertes, y Soledad suma otras 23.
Del total, 55 asesinatos han sido ejecutados bajo la modalidad de sicariato, una cifra alarmante que revela el alto nivel de violencia selectiva que enfrenta la región. El Área Metropolitana de Barranquilla concentra 67 de estos homicidios, consolidándose como uno de los focos más críticos de criminalidad en el país en este periodo.
Arturo García Medrano, expersonero de Barranquilla y experto en temas de seguridad, aseguró que estos datos reflejan “una preocupante normalización del sicariato como método de resolución de conflictos en zonas urbanas con alta vulnerabilidad social y escasa presencia institucional”.
García Medrano también advirtió que «la violencia homicida se ha vuelto sistémica, especialmente en barrios periféricos donde operan estructuras armadas dedicadas al microtráfico, la extorsión y la disputa por territorios. La respuesta del Estado debe ser integral, no solo desde la fuerza pública, sino también con inversión social sostenida.»
Una tendencia que no se detiene
Pese a los operativos y acciones adelantadas por la Policía Metropolitana y la Fiscalía, la tendencia de violencia en agosto no parece ceder. De hecho, este mes podría cerrar como uno de los más letales del año en la región, si se mantiene el promedio actual de homicidios.
La ciudadanía, por su parte, exige acciones concretas, presencia sostenida del Estado en los barrios más golpeados y estrategias de prevención enfocadas en jóvenes en riesgo, que muchas veces son cooptados por redes criminales.
Mientras tanto, sectores como 7 de Abril, La Chinita, Rebolo, Las Moras y La Central siguen siendo escenario de hechos violentos recurrentes que elevan la percepción de inseguridad entre los habitantes del Área Metropolitana de Barranquilla.