Un nuevo hecho de violencia enluta a la institución policial. El subintendente Jefferson Andrés Ortiz Ocampo, de 32 años, fue asesinado por un francotirador en pleno casco urbano del municipio de El Tarra, Norte de Santander, donde la comunidad vive con temor por la presencia de grupos armados.
De acuerdo con las autoridades, el uniformado recibió un disparo certero mientras cumplía con sus labores.
Ante el crimen, la Policía y la Gobernación de Norte de Santander anunciaron una recompensa de hasta 200 millones de pesos para quienes entreguen información que permita identificar y capturar a los responsables.
Las autoridades locales hicieron un llamado a la comunidad para colaborar con las investigaciones, al tiempo que reforzaron la seguridad en la zona para evitar nuevos ataques.