Cuando falta un mes para que se cumpla un año desde la intervención de la empresa Aire por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios (Superservicios), el panorama financiero de la compañía sigue siendo incierto y preocupa a los usuarios de energía en la Costa Caribe.
De acuerdo con Norman Alarcón, coordinador de la Liga de Usuarios de Servicios Públicos, Aire se encuentra en un grado avanzado de insolvencia, ya que no ha recibido los recursos necesarios por parte del Gobierno Nacional para garantizar la continuidad y calidad del servicio, tal como lo establece la ley en estos procesos de intervención.
Alarcón recordó que en 2016, cuando el Estado tomó el control de Electricaribe, se destinaron 7,3 billones de pesos durante cuatro años para mantener la operación, cubrir deudas con proveedores y asegurar la compra de energía. Sin embargo, en el caso de Aire no se ha dispuesto de un respaldo financiero similar, lo que ha generado preocupación en el sector eléctrico.
Según cifras del gremio de generadores, la empresa acumula actualmente deudas por 1,5 billones de pesos, una situación que podría comprometer su capacidad de cumplir con las obligaciones contractuales si no se implementa un plan de pagos claro.
En este contexto, Alarcón hizo un llamado directo al presidente Gustavo Petro, en su calidad de responsable de la designación del agente interventor, para que autorice el uso del Fondo Empresarial de la Superservicios como mecanismo de financiación y así garantizar la sostenibilidad del servicio en los departamentos atendidos por Aire.