Barranquilla no se duerme en los laureles, y mucho menos la Policía. En pleno patrullaje de rutina por la calle 91 con carrera 1 Sur del barrio Santa María, los uniformados del Modelo de Servicio de Policía Orientado a las Personas detuvieron a un sujeto de 42 años que, según la justicia, no era precisamente un angelito.
¿El motivo? Tenía encima una orden judicial por intimidación con arma de fuego, lo que lo convierte en un cliente frecuente de las autoridades. Según se supo, el hombre ya era buscado por andar amedrentando a otros ciudadanos con pistola en mano, como si fuera vaquero del Lejano Oeste.
Al verificar sus datos, ¡pum!, saltó la alerta judicial y los uniformados no dudaron: le leyeron sus derechos, lo esposaron y lo pusieron a disposición de la justicia, para que responda por andar causando terror con armas.
La Policía Nacional reiteró su llamado a la comunidad a denunciar cualquier hecho sospechoso, porque “al que la debe, la paga”, y porque la seguridad también es cosa de todos.
🔊 Líneas habilitadas: 123 (Policía Nacional), 165 (GAULA) o el número directo 317 896 5523.
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