El reloj marcaba las 2:00 de la tarde cuando el estruendo de los disparos rompió la rutina en la tienda y estadero ‘Jota’, en plena carrera 6 con calle 72, corazón del barrio La Sierrita, suroccidente de Barranquilla. Lo que parecía una tarde cualquiera entre cervezas y partidas de dominó terminó en caos y sangre.
Jean Carlos Polo Llamas, de 30 años, se encontraba en el establecimiento cuando fue sorprendido por hombres armados que irrumpieron disparando sin decir palabra. Polo cayó herido en la entrada del local, mientras el pánico se apoderaba de quienes estaban cerca.
Rápidamente fue trasladado a un centro médico, mientras la Policía activaba el plan candado. Y fue así como, en una rápida reacción, lograron capturar a uno de los supuestos pistoleros: Esneyder Rafael Calderón Márquez, de 27 años.
No es un desconocido para las autoridades. Según reportes policiales, Calderón Márquez estaría vinculado al grupo delincuencial ‘Los Costeños’ y carga con un historial nada envidiable: antecedentes por homicidio y porte ilegal de armas, ambos registrados este mismo año.
En esta ocasión, el presunto sicario también resultó lesionado durante la acción y fue trasladado bajo custodia policial a un centro asistencial.
La tienda ‘Jota’, punto habitual de encuentro del barrio, ahora está marcada por las huellas de un atentado más, en una ciudad que sigue contando víctimas mientras el crimen se pasea a plena luz del día.
