Andrea Petro, hija del presidente Gustavo Petro, ha vuelto a aparecer en escena, y como de costumbre, no dejó títere con cabeza… ni en el gabinete, ni en la familia, ni en la política nacional.
Desde su tribuna no oficial pero cada vez más escuchada, Andrea defendió que el gobierno de su padre sí ha avanzado, aunque, según ella, hay sectores que se niegan a reconocerlo. Eso sí, no todo es color de rosa: admitió que la ejecución del gobierno ha sido floja y que hay ministros que no han dado la talla. Por fortuna —según señaló— el presidente ya se dio cuenta, y vienen más sacudidas en el gabinete. ¿Otra reforma ministerial? A este paso, será más fácil cambiar de ministros que de canal en televisión nacional.
En cuanto a las recientes incorporaciones al equipo de gobierno, Andrea soltó algunas perlas: Armando Benedetti, a quien calificó como un «lobo de la política», llegó por las reformas (¿o por los secretos?), y sobre Alfredo Saade admitió que no lo conoce, pero que ha tenido «mucho conflicto». No aclaró si se refería a conflictos internos o externos, pero el ambiente no pinta armónico.

Y como si eso no fuera suficiente, le lanzó un dardo directo a la vicepresidenta Francia Márquez, pidiéndole que dé la cara y explique qué pasa con el Ministerio de la Igualdad. Eso sí, matizó que montar un ministerio no es soplar y hacer botella: hace falta tiempo, paciencia… y experiencia, de la cual parece que hay escasez.
Pero lo más íntimo llegó cuando habló de su hermano, Nicolás Petro, hoy envuelto en líos judiciales. Andrea no ocultó el drama familiar: “No hubo más familia, quedó destruida en dos bandos”. Según ella, cada quien responde por sus actos, aunque reconoció que los asuntos del poder terminaron por pasarle factura al núcleo familiar.
¿Y sobre Álvaro Uribe? Andrea fue breve, pero contundente: “Que se haga justicia porque lo que hemos visto es suficiente”. Sin más comentarios. La frase cayó como una pedrada en un lago quieto.
Finalmente, opinó con ironía sobre el creciente desfile de aspirantes presidenciales: “Colombia es el país del realismo mágico, hay 77 precandidatos”. Más que una contienda política, parece una novela de Gabriel García Márquez versión electoral.
En resumen, Andrea Petro hizo un repaso descarnado por la política, el Gobierno, su familia y el país. Y advirtió que los próximos seis meses serán clave. Si lo dice ella, será mejor abrocharse el cinturón.