domingo, julio 27, 2025

¿Ser pillo paga? La Ley de Sometimiento que promete paz… pero con penas de risa

En Colombia, la pregunta del millón vuelve a tomar fuerza: ¿ser pillo paga? Con la presentación del Proyecto de Ley No. 002 de 2025, el Gobierno busca darle forma jurídica a su anhelada Paz Total. Pero, entre beneficios, penas mínimas y muchas promesas, más de uno se pregunta si este proyecto no será más bien una amnistía con otro nombre.

La propuesta, con su nombre kilométrico —“Por medio del cual se establece un tratamiento penal diferenciado para el desmantelamiento y sometimiento de organizaciones al margen de la ley…”—, promete desmontar estructuras criminales. ¿La fórmula mágica? Penas reducidas, trato preferencial y hasta espacios rurales para pagar condenas sin barrotes de por medio.

Delincuentes sí, pero con beneficios

La ley aplicaría a tres grupos:

  • Guerrillas y grupos armados con fines políticos,
  • Bandas criminales que controlan economías ilegales,
  • Personas procesadas por protestas sociales.

Todos ellos podrán acceder a penas alternativas de 2 a 10 años, dependiendo del cargo y del prontuario. Eso sí, deben entregar armas, bienes, contar verdades (por dolorosas que sean) y dejar el crimen… en teoría.

Paz Total, ¿o impunidad total?

Uno de los puntos más polémicos es que incluso los responsables de crímenes de lesa humanidad podrían terminar pagando con penas de solo 5 a 8 años, y en colonias agrícolas o “espacios de paz” en vez de cárceles comunes. Como si fuera poco, pueden reincorporarse con proyectos productivos y con el sello de «restauradores del tejido social».

Las condiciones son muchas, sí: entregar niños reclutados, cesar delitos, entregar bienes… pero ¿quién y cómo controlará que lo cumplan?

Lo bueno, lo malo y lo que huele raro

Lo bueno: El enfoque territorial, la reparación a víctimas y la búsqueda de verdad suenan esperanzadores. También la posibilidad de desmantelar verdaderas mafias.
Lo malo: Las penas blandas, los beneficios sin claridad, y la desconfianza que arrastra cualquier intento de negociar con criminales.
Lo que huele raro: La creación de “lugares especiales” para cumplir condena. ¿Resorts de paz o prisiones de cartón?

Conclusión: paz o premio

Mientras el Gobierno defiende el proyecto como una jugada estratégica para acabar con la violencia, sus críticos lo ven como una invitación abierta a delinquir con descuentos. Lo cierto es que, entre tanto tecnicismo legal y promesa de reconciliación, la calle sigue preguntándose: ¿y las víctimas qué?

Porque en Colombia, la paz es un anhelo, pero la impunidad también tiene historia. Y esta ley, para muchos, la está escribiendo en tiempo real.

Related Articles

Stay Connected

0SeguidoresSeguir
0SuscriptoresSuscribirte
- Advertisement -spot_img

Latest Articles