La Empresa Social del Estado (ESE) UNA del Atlántico enfrenta una situación financiera «caótica», según declaraciones de Napoleón Mundo, representante de la Asociación Nacional de Trabajadores de Hospitales de Colombia (Anthoc). La crisis, atribuida a la falta de giros adecuados por parte de las Empresas Promotoras de Salud (EPS) y a «problemas administrativos no funcionales», ha llevado a un grave deterioro de los servicios y condiciones laborales.
Mundo reveló que a los trabajadores contratados por OPS (órdenes de prestación de servicios) se les adeudan entre cuatro y seis meses de salario. Esta situación ha provocado una «migración» masiva de personal, incluyendo especialistas, médicos generales, enfermeros y auxiliares, quienes han desertado en busca de mejores oportunidades. La escasez de personal ha impactado directamente en la prestación de servicios, con la disminución de atenciones en algunas sedes e incluso la evacuación de pacientes de la UCI de Juan Domínguez Romero, trasladándolos a instituciones de alta complejidad.
Ante la propuesta de dividir y liquidar las sedes de la ESE UNA, Mundo expresó la preocupación de Anthoc. El sindicato ha solicitado formalmente su participación en las mesas de discusión para entender los planteamientos y asegurar que se busquen los recursos para saldar las deudas actuales. Recordó que de una liquidación anterior aún se deben 80 millones de pesos, lo que genera incertidumbre sobre cómo se manejarán los nuevos compromisos financieros.
Respecto a la administración, Mundo señaló que el gerente anterior, quien fue reemplazado por la actual encargada, la doctora Romery, contrajo compromisos «incumplibles» que resultaron en el embargo de recursos provenientes de la Gobernación del Atlántico. Atribuyó parte de la crisis a la falta de experiencia en el manejo de lo público por parte de algunos administradores.
Aunque Anthoc no se opone de plano a la extinción de las sedes, Mundo enfatizó la necesidad de evaluar las propuestas del gobernador, recordando que en la fusión de los cinco hospitales anteriores, los trabajadores de planta no se vieron afectados y se respetaron los acuerdos sindicales. Además, el personal que trabajaba por cooperativa fue contratado directamente por la ESE.
Finalmente, Napoleón Mundo afirmó rotundamente que la ESE 1 no es viable financieramente en su estado actual, citando un déficit de 120 mil millones de pesos y la precariedad de los contratos con las EPS, cuyos valores están «muy por debajo» de lo necesario para la funcionalidad de la institución.