La Fiscalía General de la Nación abrió una indagación preliminar sobre el presunto plan del excanciller Álvaro Leyva para impulsar la salida del presidente Gustavo Petro, a través de apoyos en sectores políticos de Estados Unidos. La investigación surge a raíz de la publicación del diario El País de España, que reveló grabaciones y detalles de supuestas gestiones del exfuncionario para lograr respaldo internacional en esa dirección.
Fuentes del ente acusador confirmaron que se están adelantando actuaciones judiciales e investigativas, con órdenes a la Policía judicial, para establecer el alcance de los hechos denunciados y verificar si configuran algún tipo de delito. “Se están recopilando elementos que permitan determinar con claridad lo sucedido”, indicaron.
De acuerdo con la denuncia periodística, Leyva habría sostenido reuniones en territorio estadounidense, hace aproximadamente dos meses, con el congresista republicano Mario Díaz-Balart. El propósito habría sido acercarse al secretario de Estado, Marco Rubio, para ejercer presión política y favorecer un relevo presidencial que pondría en el cargo a la vicepresidenta Francia Márquez.
El escándalo generó una inmediata respuesta de Márquez, quien se desmarcó de cualquier intento de conspiración. “Jamás he traicionado ni cuestionado la legitimidad del presidente Petro. No participo en maniobras desestabilizadoras y quienes intenten usar mi nombre para ello están profundamente equivocados”, expresó mediante un comunicado.
Leyva, de 82 años, se desempeñó como ministro de Relaciones Exteriores durante el primer año de gobierno de Gustavo Petro, pero salió del cargo en medio de controversias relacionadas con un proceso de contratación de pasaportes. Desde entonces ha criticado duramente al mandatario, incluso sugiriendo problemas de salud y consumo de sustancias, hechos que, según reveló El País, consideraba claves para justificar su propuesta de cambio de liderazgo.
La Fiscalía continuará con las investigaciones para esclarecer los hechos y determinar si existe mérito para abrir una investigación formal. Mientras tanto, el tema ha generado reacciones de rechazo desde distintos sectores políticos, que advierten sobre la gravedad de cualquier intento de alterar el orden institucional.