Una oleada de críticas de políticos de distintos sectores, que calificaron el hecho como un atentado contra la democracia.
La supuesta trama del excanciller colombiano Álvaro Leyva de haber buscado apoyo en círculos republicanos de Estados Unidos para sacar del poder al Presidente Gustavo Petro, revelada por el diario El País, desató este domingo una oleada de críticas de políticos de distintos sectores, que calificaron el hecho como un atentado contra la democracia.
Una de las primeras en reaccionar fue la ministra de Relaciones Exteriores, Laura Sarabia, quien aseguró que «esto no es solo un ataque contra Petro, es un atentado contra la democracia misma».
«Ruin y miserable. No encuentro mejores palabras para describir a Álvaro Leyva. La ambición desmedida por el poder lo llevó a conspirar contra nuestra institucionalidad», escribió en X la canciller, y agregó: «El mandato del presidente debe ser respetado y defendido por todos y todas».
En la misma línea se pronunció el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, quien afirmó que «las conductas del excanciller son de suma gravedad, son delitos contra la democracia y constituyen traición a la patria».
«Y en estos episodios ha quedado desnudada su poca condición humana», agregó Sanguino en X sobre Leyva.
Según reveló El País, Leyva —quien fue el primer canciller de Petro y lo ha acusado reiteradamente de tener problemas de adicción a las drogas— se reunió hace dos meses en Estados Unidos con el congresista Mario Díaz-Balart, en un intento por acercarse al secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y ejercer «presión internacional» contra Petro para poner en su lugar a la vicepresidenta Francia Márquez.
Rechazos desde fuera del Gobierno
A las reacciones frente a esta supuesta trama se sumó el exministro del Interior en los gobiernos de Petro y de Juan Manuel Santos (2010-2018) Juan Fernando Cristo, quien consideró que el hecho de que el excanciller «se encuentre detrás de esas maniobras es peligroso y decepcionante» y «muy grave».
«Todos los colombianos debemos rechazar cualquier intento de afectar el periodo institucional del presidente Petro», expresó Cristo en X.
Por su parte, la periodista y aspirante presidencial Vicky Dávila —férrea crítica del Gobierno de Petro y mencionada en el artículo de El País como supuesta «interlocutora válida» para atraer a políticos en Colombia y Estados Unidos— se deslindó del caso.
«No tengo nada qué ver con estas ideas del excanciller Álvaro Leyva que menciona El País. No estoy de acuerdo con que tumben a Petro, siempre lo he dicho, en público y en privado», escribió Dávila en X.
La exdirectora de la revista Semana, quien hace quince días inscribió su iniciativa independiente Movimiento Valientes de cara a las elecciones presidenciales del año próximo, agregó: «Lo que sí pienso, y en lo que sí estoy trabajando, es en derrotar a la izquierda dañina democráticamente en las urnas el 31 de mayo de 2026».
El exsenador Humberto de la Calle, exvicepresidente en el gobierno de Ernesto Samper (1994-1998), ex negociador de paz y figura clave durante años del Partido Liberal, coincidió en que las acusaciones contra Leyva son «muy graves» y «hay que rechazarlas».
«Una cosa es la crítica y otra la conspiración. El periodo de Gustavo Petro es intocable», sentenció el político.
Leyva ha estado en el centro de una polémica desde comienzos del año pasado cuando dejó la Cancillería al ser suspendido por la Procuraduría (Ministerio Público) debido a problemas con un contrato para la emisión de pasaportes.
A eso le siguió la publicación de varias cartas públicas que hablan de la supuesta adicción de Petro a las drogas, revelaciones que, según El País, el veterano político consideraba que serían el primer paso para sacarlo de la Presidencia.