La noche del lunes encendió alarmas en la Ciudadela 20 de Julio, suroriente de Barranquilla. A las 8:50 p. m., un trabajador del motel Friend, ubicado frente al estadio Metropolitano, fue abatido a balazos mientras cumplía con sus labores.
La víctima, identificada como Estegüin Rafael Orozco De León, de 36 años, recibió dos disparos: uno en el cuello y otro en la cabeza, perpetrados por un hombre aún sin identificar, que se le acercó sigilosamente y le disparó sin mediar palabra. Sus compañeros lo trasladaron de inmediato al centro de salud Camino Ciudadela 20 de Julio, donde los médicos confirmaron su muerte.
Orozco, natural de Cerro de San Antonio y residente del barrio Galán, llevaba más de diez años vinculado al motel, aunque hacía tres meses se ausentó tras recibir amenazas por extorsión. Hace apenas una semana había retomado su trabajo, lo que podría haber reactivado los peligros que lo acechaban.
El CTI de la Fiscalía asumió el caso. Una de las líneas de investigación apunta a una posible retaliación derivada de extorsiones; sin embargo, tampoco se descarta un conflicto personal. Entre los datos recabados, se sabe que el trabajador tenía dos anotaciones judiciales: una por porte de estupefacientes en marzo de 2010 y otra por ejercicio ilícito de actividad monopolística en mayo de 2018.
Ciudadanos y entorno laboral exigen claridad y justicia inmediata. La muerte de Orozco no solo enluta a su familia, sino que reaviva el temor de los negocios que operan bajo la mira del crimen organizado en la zona.