El Gobierno de Gustavo Petro no solo quiere seguir los pasos del período de Iván Duque y tener dos Reformas Tributarias aprobadas en su cuatrienio, sino que cuando radique el proyecto de ley tendrá el «honor» de haber presentado tres reformas de este tipo en tres años, es decir, una por año.
Así lo confirmó el Ministro de Hacienda, Germán Ávila, quien señaló que este proyecto de ley es necesario para «lograr una tendencia en 2027 de un ajuste sobre gasto inflexible de un punto del PIB”.
La meta para el Gobierno es radicar la reforma a finales de julio, que sea tramitada por el Congreso y que recaude entre $19.6 billones y $24.5 billones.
La Reforma Tributaria modificaría la estructura del IVA, lo impondría en los juegos de azar, plataformas e iglesias. Traería un impuesto especial para carbón y petróleo, y otros más para plaguicidas, ruido, vapeadores, entre otros.
También contempla una modificación al ImpoConsumo y cambios adicionales al impuesto de renta a personas naturales.
Las críticas no se han hecho esperar, por ejemplo, el Comité Autónoma de la Regla Fiscal (CARF) consideró que la estrategia fiscal «no permite apuntalar la credibilidad y resulta insuficiente para estabilizar la deuda en el ancla prudente en el mediano plazo».
Por su parte, la senadora y precandidata presidencial Paloma Valencia sostuvo que esta reforma es «el derroche para año electoral».
Ante los señalamientos, la cartera aclaró en X que «el Gobierno no ha anunciado cambios en la tarifa del IVA» y que la reforma «no debe entenderse como una medida tradicional de ajuste fiscal, sino como una oportunidad para repensar el uso y la eficiencia de los tratamientos diferenciales y los beneficios tributarios de la Nación».
Tercer intento de Reforma Tributaria
Para el Presidente Gustavo Petro, este es el tercer intento de una Reforma Tributaria, la primera la presentó en 2022 y fue aprobada por el Senado, rigiendo en el país desde 2023.
Entre los cambios presentados se encuentra el aumento de impuestos para grandes empresas y personas de alto rango, para bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, gravámenes para la minería y el petróleo y la eliminación de otras exenciones.
Con esta ley, el Gobierno logró recaudar aproximadamente $19,7 billones, pero para afrontar el 2025 presentó al legislativo la ley de financiamiento, que aunque tenía otro nombre, su finalidad era recolectar dinero para afrontar la crisis presupuestal.
Pero esta vez el panorama en el Senado fue otro y aunque el objetivo se limitaba a $9 billones, el Congreso rechazó de plano esta petición de Petro.
Las Comisiones Económicas de la corporación consideraron el proyecto de ley inoportuno, al considerar que la economía colombiana no resistiría la suma de más impuestos.
Es importante recordar que al Gobierno de Duque le aprobaron dos tributarias, una por $9 billones en 2019 y otra por $15,2 billones en 2021, para empezar a afrontar los problemas que había dejado la pandemia.
Suspensión de la regla fiscal
Junto a la Reforma Tributaria, el Gobierno también presentó la suspensión por tres años de la regla fiscal.
«Hemos tomado la decisión de activar lo que se conoce como la ‘cláusula de escape’, que permite realizar un desvío temporal del cumplimento de las metas fiscales», dijo el ministro Ávila en la presentación del ‘Marco Fiscal de Mediano Plazo’.
La «cláusula de escape» está prevista en la ley para cuando ocurren situaciones que comprometan la estabilidad macroeconómica del país y, según Ávila, «no tomar esta decisión comprometería efectivamente la estabilidad macroeconómica y el crecimiento económico que se tiene proyectado para el desarrollo del país».
