La controversia por la devolución del dinero invertido por Barranquilla en los Juegos Panamericanos 2027 sigue sin resolverse, dejando en el aire una pregunta crucial: ¿quién asumirá la responsabilidad por los recursos públicos destinados a este evento que ya no se celebrará en la ciudad?
Los hechos:
Barranquilla había destinado alrededor de $9.000 millones de pesos colombianos (aproximadamente $2.3 millones de dólares) para la organización de los Juegos Panamericanos, evento para el cual fue originalmente seleccionada como sede. Sin embargo, la decisión de retirar la sede a la ciudad fue tomada por Panam Sports debido a incumplimientos de pagos por parte de Colombia, situación que dejó en la incertidumbre la posibilidad de recuperar el dinero.
El alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, ha solicitado la devolución de esos recursos a la organización, mientras que tanto él como el Gobierno nacional han expresado su desacuerdo con la decisión de Panam Sports y se han comprometido a recuperar el dinero a través de vías legales.
El conflicto:
Panam Sports, la organización encargada de la supervisión de los Juegos, se ha negado a devolver la mayor parte del dinero, argumentando que el incumplimiento de pagos por parte del Gobierno colombiano justifica la negativa. La falta de resolución clara sobre este tema deja a la ciudad y a los contribuyentes barranquilleros sin respuesta concreta sobre cómo se manejará esta importante suma de dinero público.
Por su parte, el gobierno de Gustavo Petro ha reclamado formalmente a Panam Sports, acusando a la organización de terminar el convenio unilateralmente y dejando a Barranquilla con una situación financiera compleja y sin precedentes.
¿Qué está en juego?
La alcaldía de Barranquilla y el Gobierno nacional ahora enfrentan varios escenarios posibles:
- Litigio: Las autoridades locales y nacionales pueden emprender acciones legales para intentar recuperar el dinero, lo que podría prolongar el conflicto y aumentar la tensión con Panam Sports. Sin embargo, la efectividad de esta vía depende de la capacidad legal y la voluntad de la organización de negociar.
- Negociación: Existe la posibilidad de que se continúen las negociaciones para llegar a un acuerdo sobre la devolución parcial o total del dinero invertido. Sin embargo, el ambiente de desconfianza y las acusaciones cruzadas dificultan este proceso.
- No devolución: En el peor de los casos, Panam Sports podría negarse a devolver el dinero, lo que llevaría a Barranquilla y al Gobierno nacional a una situación aún más complicada, con un serio cuestionamiento sobre la administración de los recursos y la transparencia en la gestión del proyecto.
Cuestionando las decisiones:
El proceso de retirada de la sede de los Juegos Panamericanos y la negativa de Panam Sports a devolver el dinero ha dejado un sabor amargo entre los barranquilleros y los colombianos en general. Si bien el incumplimiento de los pagos por parte de Colombia no puede ser ignorado, la decisión de Panam Sports ha sido percibida como una muestra de falta de flexibilidad y compromiso con las ciudades que habían trabajado para organizar el evento.
Además, el rol del Gobierno nacional y la Alcaldía de Barranquilla en la gestión de los fondos y la protección de los intereses locales está siendo cuestionado. ¿Por qué se llegó a esta situación? ¿Por qué no se tomaron medidas más oportunas para garantizar que los compromisos fueran cumplidos a tiempo? Las respuestas aún están por llegar.
En resumen, la disputa por la devolución del dinero de los Juegos Panamericanos sigue sin solución, mientras Barranquilla y el Gobierno de Petro buscan recuperar los recursos invertidos, pero enfrentan un panorama incierto con Panam Sports. Lo que parecía ser un gran evento para la ciudad ahora se convierte en un tema de litigio, desconfianza y dudas sobre la gestión de los recursos públicos.