Iván Leonidas Name Vásquez, expresidente del Senado de Colombia, fue trasladado a la cárcel La Picota de Bogotá tras su captura por orden de la Corte Suprema de Justicia. El excongresista está siendo investigado por su presunta participación en un escándalo de corrupción relacionado con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Según las autoridades, Name habría recibido sobornos por un total de 3.000 millones de pesos para facilitar la aprobación de reformas del gobierno del presidente Gustavo Petro, a pesar de haber votado en contra de ellas. Los pagos, presuntamente entregados en efectivo en su apartamento días antes de las elecciones en las que su hija fue reelegida concejal, habrían sido gestionados por exfuncionarios de la UNGRD.
La investigación también involucra a otros exfuncionarios y exministros, quienes han colaborado con la justicia, proporcionando testimonios que han permitido avanzar en el caso. Hasta la fecha, cinco personas han sido detenidas y tres exfuncionarios están colaborando con las autoridades.
Iván Name ha negado las acusaciones en su contra y ha afirmado que sus ausencias del Congreso fueron no premeditadas. Además, ha expresado su intención de someterse al juicio de la Corte Suprema de Justicia y ha rechazado cualquier intento de trasladar su caso a otra instancia judicial.
La captura y traslado de Iván Name a la cárcel La Picota marcan un nuevo capítulo en el escándalo de corrupción que ha sacudido al país, generando un amplio debate sobre la transparencia en la gestión pública y la necesidad de fortalecer las instituciones encargadas de velar por el manejo adecuado de los recursos del Estado.
