La tranquilidad de la noche caleña se vio interrumpida este viernes tras la detonación de un artefacto explosivo contra un CAI de la Policía en el sector Petar, del barrio Jorge Eliécer Gaitán, al oriente de Cali. Aunque el ataque no dejó personas heridas, sí provocó daños materiales en las instalaciones y en sus alrededores, generando alarma entre los residentes.
En respuesta inmediata, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, se desplazó hasta el sitio acompañado de altos mandos de la Policía Metropolitana. Desde allí, lanzó un contundente mensaje: el gobierno local no permitirá que hechos violentos como este intenten intimidar a la ciudadanía ni a la institucionalidad.

“Ofrecimos una recompensa de hasta 50 millones de pesos para capturar a los responsables, porque no vamos a permitir que la delincuencia se imponga sobre nuestra ciudad”, afirmó el mandatario, reiterando su compromiso con el restablecimiento del orden y la seguridad.
Las autoridades ya iniciaron las labores de investigación, incluyendo el análisis de cámaras de seguridad de la zona y la recolección de testimonios. El hecho se da en un contexto donde la administración ha reforzado su discurso contra los actores armados y redes delincuenciales.
Se espera que en las próximas horas se revelen más detalles sobre las hipótesis del atentado y los posibles grupos detrás del ataque. Mientras tanto, el llamado de la Alcaldía es a la colaboración ciudadana para identificar a los responsables.