Controversia comienza a generar este hecho en Fundación, donde se presume que la alcaldesa Luz Helena Andrade Campo habría despedido a un vigilante simplemente por haber saludado a través de sus redes sociales a la exalcaldesa Mallath Martínez Cantillo.
José Murillo, quien se desempeñaba como trabajador en una empresa de vigilancia, expresó que fue despedido «por desearle el bien» a la exmandataria, lo que consideró una decisión un tanto «ridícula».
Murillo manifestó que su acción en redes sociales no debería haber sido motivo para que la alcaldesa prescindiera de sus servicios. Además, se conoció que al parecer, durante su tiempo en la empresa, no se le proporcionaba la correspondiente seguridad social a sus compañeros. Sin embargo, esta situación deberá ser aclarada por la empresa al igual que la razón de la desvinculación laboral.
El caso sigue en desarrollo y generando una fuerte discusión sobre la libertad de expresión y las decisiones laborales que rayan en el colmo y vulbnera el derecho al trabajo y bienestar social de los clase trabajadora.