Orlando Jiménez, presidente de la Unión Nacional de Comerciantes (Undeco), aseguró que las tiendas de barrio en el país siguen enfrentando serias dificultades debido a la competencia desleal de las grandes superficies de mercados, que desde hace más de doce años han afectado gravemente sus ventas.
Según Jiménez, cadenas como ARA, D1 y la expansión de Olímpica han provocado una disminución constante en las ventas de los pequeños comercios locales.
«Las tiendas se han convertido en una especie de miscelánea, pero a pesar de esta transformación, las ventas siguen a la baja debido a la llegada de estas grandes cadenas, que tienen una capacidad de oferta y precios que es muy difícil de competir», afirmó Jiménez. Estas grandes superficies, según el dirigente gremial, han alterado el equilibrio del mercado local, dificultando la supervivencia de los pequeños comercios en barrios y zonas residenciales.
La extorsión, otro desafío para los tenderos
Jiménez también destacó otro grave problema que sigue afectando al comercio en la región: la extorsión. A pesar de los esfuerzos de las autoridades para combatir este delito, muchos tenderos siguen siendo víctimas de amenazas y cobros ilegales por parte de grupos criminales.
«El delito de la extorsión sigue siendo una de las principales amenazas para los pequeños comerciantes, y aunque las autoridades están actuando, las extorsiones no paran. Este es un problema que afecta la seguridad y la estabilidad económica de miles de tenderos en la zona», indicó Jiménez.
El presidente de Undeco hizo un llamado a las autoridades para que redoblen esfuerzos en la lucha contra las extorsiones y ofrezcan más apoyo a los pequeños comerciantes, quienes son el motor económico de muchas comunidades en el país.
Mientras tanto, los tenderos de la región continúan enfrentando estos retos, a la espera de que se implementen medidas más efectivas para garantizar su supervivencia y competitividad frente a las grandes cadenas comerciales y las organizaciones criminales que afectan la zona.
