En una operación conjunta entre el Ejército, la Policía y la Fiscalía, fue capturado William Monje Claros, alias ‘Willington’, uno de los cabecillas de la organización criminal Comandos de Frontera. La aprehensión se llevó a cabo en el municipio de San José de Fraguas, en el departamento de Caquetá, y fue confirmada por el comandante del Ejército, Luis Emilio Cardozo.
Alias ‘Willington’ era uno de los hombres más buscados del país debido a su implicación en una serie de delitos, entre los que se incluyen homicidios, narcotráfico, extorsión y crímenes contra líderes sociales y excombatientes. La captura de ‘Willington’ pone fin a una larga búsqueda por parte de las autoridades, que ofrecían una recompensa de hasta $500 millones por información que llevara a su arresto.
Además, el comandante Cardozo detalló que el criminal tenía una circular azul emitida por Interpol, lo que indica que su perfil estaba en las bases de datos internacionales, buscando facilitar su captura en otros países.
La caída de ‘Willington’ se suma a otro golpe significativo al mismo grupo armado, pues la semana pasada fue capturado su máximo comandante, alias ‘Araña’, durante un ciclo de diálogo de paz entre el Gobierno Nacional y grupos armados. Giovanni Andrés Rojas, conocido como ‘Araña’, también tenía circular roja de la Interpol por narcotráfico, lo que resalta la importancia de estos operativos para desarticular las estructuras del crimen organizado.
Operativos exitosos y fortalecimiento de la seguridad
El Ejército y la Policía han destacado la importancia de la captura de ‘Willington’, ya que este cabecilla era clave para las operaciones de Comandos de Frontera, un grupo conocido por su accionar en el narcotráfico y las actividades criminales en la región fronteriza. La caída de estos líderes representa un avance significativo en la lucha contra los grupos armados ilegales que operan en el país.
La captura de alias ‘Willington’ y otros cabecillas de su grupo refuerza el compromiso de las autoridades con la seguridad y la lucha contra el crimen organizado, buscando garantizar la paz y el bienestar de las comunidades afectadas por estas organizaciones.
Las autoridades continúan con la investigación para desmantelar por completo las redes de Comandos de Frontera, mientras refuerzan los operativos en otras zonas del país.
