La Universidad del Atlántico se encuentra en el centro de una controversia interna tras el reciente anuncio de la candidatura de la exrectora Ana Sofía Mesa al Consejo Superior de la institución.
La situación ha generado un fuerte pronunciamiento por parte del sindicato de la universidad, que ha expresado su desacuerdo con esta postulación.
A través de sus canales oficiales, el sindicato de trabajadores de la Universidad del Atlántico (@udeatlantico) emitió un comunicado en el que manifiesta su rotundo rechazo a la candidatura de Ana Sofía Mesa. En su pronunciamiento, señalan que la exrectora, quien lideró la institución durante el periodo anterior, dejó una serie de irregularidades y malas gestiones que afectaron gravemente tanto a la comunidad educativa como a la calidad institucional.
Los miembros del sindicato cuestionan especialmente la falta de transparencia en la administración durante el mandato de Mesa, mencionando que durante su gestión hubo una serie de decisiones que perjudicaron el bienestar de los estudiantes y trabajadores. Según el sindicato, las políticas implementadas en su periodo fueron controvertidas, y varios proyectos fundamentales para el avance de la universidad se vieron truncados por una aparente falta de liderazgo y eficiencia.
Además, el sindicato ha alertado sobre los posibles conflictos de interés que podrían surgir si la exrectora asume un puesto en el Consejo Superior. Aseguran que el cargo debe ser ocupado por una persona que pueda representar los intereses de toda la comunidad universitaria de manera imparcial y con la capacidad de tomar decisiones transparentes, lo cual, según el sindicato, no es el caso de Ana Sofía Mesa, debido a su historial al frente de la administración.
Por su parte, Ana Sofía Mesa defendió su candidatura, argumentando que su experiencia al frente de la rectoría la convierte en una persona calificada para ocupar un espacio en el Consejo Superior. Asegura que su objetivo es trabajar por la estabilidad y el progreso de la Universidad del Atlántico, aunque reconoce que su gestión fue polémica y que algunas decisiones fueron difíciles.
Este enfrentamiento ha elevado la tensión dentro de la universidad, y se espera que en los próximos días se realicen más pronunciamientos tanto a favor como en contra de la candidatura de Mesa. Mientras tanto, la comunidad universitaria sigue atenta al desarrollo de los acontecimientos, en un contexto de creciente preocupación por el futuro de la institución.
La elección de nuevos miembros del Consejo Superior será crucial para determinar el rumbo de la Universidad del Atlántico en los próximos años. Con un escenario de polarización interna, los miembros de la comunidad educativa y los trabajadores seguirán vigilantes a las decisiones que se tomen durante este proceso.