La vía Panamericana, que conecta los departamentos de Cauca y Nariño, se encuentra cerrada en ambos sentidos debido a la instalación de dos cilindros explosivos sobre la carretera, en un nuevo acto de terrorismo que ha generado alarma en la región. Los artefactos, que fueron encontrados por las autoridades, están marcados con emblemas de las disidencias de las FARC, lo que sugiere que el ataque podría estar vinculado a este grupo armado ilegal.
Según el reporte preliminar de las autoridades, los cilindros fueron hallados en una de las zonas más transitadas de la vía, lo que obligó a las autoridades a cerrar el paso para evitar posibles víctimas. Junto a los cilindros, también se encontraron cordones detonantes, lo que aumenta la gravedad del hallazgo y confirma que los artefactos estaban listos para ser activados.
El hallazgo se produjo durante una operación de seguridad y control realizada por el Ejército Nacional y la Policía en la zona, que han activado un protocolo de seguridad para la desactivación de los explosivos. Expertos en desactivación de artefactos explosivos (EOD) fueron enviados al lugar para garantizar que los cilindros sean desactivados de manera segura y evitar una tragedia.
El cierre de la vía Panamericana, una de las principales arterias de comunicación entre el sur y el centro del país, ha generado un significativo impacto en la movilidad en la región. El tráfico ha sido desviado por rutas alternas, aunque se prevé que el cierre de la carretera continúe hasta que se complete la desactivación de los explosivos. Los viajeros y transportistas han sido instados a mantenerse informados sobre la situación y a seguir las indicaciones de las autoridades.
El acto de violencia ocurre en un contexto de creciente preocupación por la presencia y actividad de grupos armados ilegales, en particular las disidencias de las FARC, en la región del Cauca y Nariño. Estos grupos han intensificado sus acciones en las últimas semanas, lo que ha incrementado el riesgo para las comunidades y los viajeros que transitan por la zona.
Investigación en curso
Las autoridades locales y nacionales han abierto una investigación para esclarecer los detalles del ataque y dar con los responsables de esta nueva amenaza terrorista. Además, se ha reforzado la presencia de militares y policías en la zona, mientras se realizan los esfuerzos para garantizar la seguridad en la región.
La comunidad, especialmente los residentes y transportistas de los departamentos de Cauca y Nariño, se mantienen en alerta ante esta situación, que refleja la persistente violencia que sigue azotando diversas zonas del país. Las autoridades han expresado su compromiso de hacer todo lo posible para restablecer el orden y garantizar que los responsables de este ataque sean llevados ante la justicia.