La violencia en el fútbol colombiano volvió a ser noticia tras una serie de incidentes ocurridos antes y durante el partido entre Junior y América de Cali. En un lamentable episodio, varios hinchas de Junior agredieron a un seguidor, quien tuvo que ser trasladado a un centro médico. La situación se complicó aún más cuando se registró otro ataque en el que un integrante de la barra ‘Los Kuervos’ agredió a un grupo de mujeres y a una gestora de convivencia del Ministerio del Interior.
Gabriel Rendón, viceministro del Interior para el Diálogo Social y Derechos Humanos, anunció una sanción de cinco años sin acceso al estadio Metropolitano para el agresor. En sus declaraciones, Rendón enfatizó el compromiso del gobierno de rechazar enérgicamente cualquier forma de violencia, especialmente contra las mujeres. “Los estadios deben ser espacios seguros donde las familias puedan disfrutar del fútbol sin miedo”, subrayó.
Además, la Policía local ya ha actuado en respuesta a estos hechos. Un sospechoso fue capturado y se publicó una lista con las características de otros involucrados en la agresión. Esto demuestra un esfuerzo por parte de las autoridades para garantizar la seguridad de los asistentes.
La Dimayor también se pronunció, respaldando la medida del Ministerio del Interior. “El fútbol debe ser un espacio de armonía. Cualquier comportamiento violento que atente contra esta premisa será sancionado con la máxima severidad”, expresó la entidad en un comunicado.
Este contexto de violencia resalta la necesidad urgente de crear un ambiente más seguro y respetuoso en los estadios colombianos, donde todos los aficionados puedan disfrutar del deporte que aman sin temor a agresiones.