“Clan del Golfo” refuerza su control en el Magdalena con extorsiones y violencia

El grupo armado “Clan del Golfo” ha intensificado su dominio en varios municipios del departamento del Magdalena, imponiendo un régimen de terror que incluye extorsiones, intimidaciones, asesinatos, control del narcotráfico y violaciones a menores.

Los municipios afectados por esta creciente ola de violencia y criminalidad son Sábanas de San Ángel, El Difícil, Ariguaní, Nueva Granada, Plato, Chibolo, Zapayán, Tenerife, Pedraza y Pivijay.

En estas áreas, el “Clan del Golfo” ha establecido un sistema de extorsión que se extiende a todos los aspectos de la vida cotidiana. Los residentes deben pagar por cada cabeza de ganado que poseen, y los profesores están obligados a entregar una cuota mensual bajo amenaza. Además, el grupo armado ha impuesto una ley severa: cualquier persona involucrada en una riña debe abonar un millón de pesos en menos de 24 horas, bajo riesgo de represalias violentas.

Los líderes del “Clan del Golfo” se desplazan libremente entre el corregimiento de La Estrella, en Chibolo, y las vías hacia Sábanas de San Ángel y Nueva Granada. A pesar de los esfuerzos de las autoridades para frenar su influencia, los cabecillas continúan operando con impunidad, utilizando camionetas blindadas proporcionadas por la Unidad Nacional de Protección (UNP). Alias “Richard”, uno de los líderes más notorios, ha sido visto en El Difícil y Sábanas de San Ángel, frecuentando bares y discotecas.

La situación ha generado un ambiente de temor y desesperanza entre los habitantes de la región. Sin embargo, el alcalde de Plato, Armando Campuzano Restrepo, ha sido una figura destacada en la lucha contra el grupo armado. Campuzano, en colaboración con la Policía Nacional, el Ejército, el Gaula, Sijin, Dijin y Sipol, ha realizado importantes inversiones en seguridad, logrando forzar al “Clan del Golfo” a replegarse hacia zonas rurales.

Aunque las acciones recientes de la fuerza pública han debilitado al grupo y reducido algunos de sus delitos, como extorsiones y asesinatos, la amenaza del “Clan del Golfo” persiste, manteniendo a la población en un estado constante de alerta y miedo.

Las autoridades continúan trabajando para erradicar la influencia del grupo armado y devolver la tranquilidad a los municipios afectados.