Tras la captura de Giovanny Andrés Díaz, padrastro de Jerónimo Angulo y principal sospechoso del asesinato del niño de tres años, surge la preocupación por el bienestar de los cinco hermanos de Jerónimo, hijos de Díaz con la madre de la víctima.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) ha asumido la protección de los menores y está proporcionando apoyo psicosocial para ayudarles a afrontar esta difícil situación. Los hermanos de Jerónimo se encuentran bajo la custodia de las autoridades mientras se esclarece el caso y se determina su futuro.
La captura de Díaz ha generado conmoción en la comunidad, especialmente por las múltiples versiones que dio sobre la desaparición de Jerónimo antes de que su cuerpo fuera encontrado. La última versión, en la que afirmaba que el niño desapareció mientras jugaba con sus hermanos, ha levantado sospechas sobre la relación de Díaz con los otros niños y el posible motivo detrás del crimen.
La madre de Jerónimo, por su parte, ha sido hospitalizada tras enterarse del asesinato de su hijo, y se encuentra recibiendo atención médica por el impacto emocional que le ha causado la tragedia.
El cuerpo de Jerónimo Angulo aún no ha sido entregado a la familia, y las autoridades continúan investigando las circunstancias exactas de su muerte.
