En el municipio de Barrancas, La Guajira, una tragedia ha conmocionado a la comunidad, dejando dolor, tristeza e impotencia.
Una mujer, en las últimas semanas de embarazo, tomó la terrible decisión de interrumpir su gestación y, de manera escalofriante, procedió a descuartizar a su propia hija recién nacida.
Los residentes de la localidad hicieron el desgarrador descubrimiento al encontrar las partes del cuerpo de la bebé enterradas en una zona boscosa cercana a una vivienda. La Policía fue alertada de inmediato.
“Es incomprensible cómo pudo tener el valor de interrumpir su embarazo y luego perpetrar semejante acto con su propia hija. Solo puedo imaginar el dolor involucrado en esta situación”, expresó un habitante consternado.
Las autoridades han iniciado investigaciones exhaustivas para esclarecer los hechos y localizar a la responsable. Se busca determinar si actuó sola o en complicidad con otras personas.
La brutalidad de este acto ha dejado a la comunidad consternada, mientras esperan respuestas sobre los motivos que llevaron a la madre a cometer tan horrendo crimen.
