El año 2023 ha sido testigo de una escalada de violencia en Barranquilla y su área metropolitana, con un preocupante aumento en el número de masacres en comparación con el año anterior. Nueve eventos violentos han dejado un saldo desgarrador de 31 víctimas mortales, marcando un sombrío contraste con las cinco masacres y 18 víctimas registradas en 2022.
Desde enero, la región ha experimentado momentos alarmantes, principalmente atribuidos a los enfrentamientos mortales entre las bandas ‘Los Costeños’ y ‘Los Pepes’, lideradas por Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias ‘Castor’, y Digno Palomino, respectivamente. Aunque los líderes están en prisión, sus subalternos han mantenido un clima de caos y violencia en la zona.
Impacto de las Masacres
Hasta la fecha, se han registrado nueve masacres en Barranquilla y municipios del área metropolitana, cobrando la vida de 31 personas. Los lugares más afectados incluyen Soledad, Barranquilla, Malambo, y Puerto Colombia.
La masacre más reciente ocurrió el 23 de octubre en el barrio Carnero de Soledad, donde hombres armados ingresaron a un billar, buscando a un miembro de la banda ‘Los Costeños’, resultando en la muerte de tres personas inocentes y dejando a otras tres heridas.
Casos Emblemáticos:
- Malambo (21 de octubre): El barrio Los Ciruelos fue el escenario de una masacre que dejó cuatro personas muertas y dos heridas. El ataque perpetrado por sicarios en moto conmovió a la comunidad, y hasta ahora no se han obtenido resultados en la investigación.
- Villa Campestre (29 de junio): Un comando armado asaltó Villa Campestre, en Puerto Colombia, dejando tres personas muertas y una herida. El ataque, ejecutado desde un centro comercial, afectó a miembros de la misma familia.
- Soledad (29 de mayo): El barrio Viña del Rey sufrió una masacre donde tres vidas fueron segadas, incluyendo la de un niño de 7 años. Sicarios a bordo de motocicletas dispararon indiscriminadamente, dejando un impacto devastador en la comunidad.
La falta de respuestas y la impunidad en casos anteriores aumentan la inquietud de la ciudadanía, señalando la necesidad de acciones contundentes por parte de las autoridades para enfrentar y disminuir la ola de violencia en la región.
La sociedad barranquillera demanda medidas eficaces que garanticen la seguridad y la justicia, especialmente ante la creciente amenaza de la violencia. La comunidad espera que las autoridades aborden este problema de manera integral y efectiva para proteger la vida de los ciudadanos.
