Conductores que transitan por la carretera oriental, específicamente a la altura de la bomba, han expresado su preocupación y alegan que la cámara de fotomultas ubicada en esa zona está tomando fotos de manera ilegal. Numerosos afectados han denunciado situaciones en las que se sienten perjudicados por las capturas realizadas por dicha cámara mientras transitan por esta vía nacional.
Las quejas de los conductores se centran en la presunta ilegalidad en el proceso de captura de imágenes por parte de la cámara de fotomultas. Se ha informado que algunos conductores han recibido notificaciones de infracciones que consideran injustas y que no se corresponden con presuntas violaciones de normas de tráfico.
Hasta el momento, no se ha proporcionado una respuesta oficial por parte de las autoridades encargadas de la gestión de las fotomultas. Se espera que se lleve a cabo una investigación para esclarecer la situación y determinar si existe algún malfuncionamiento en el sistema de captura de imágenes o si hay fundamentos legales para las presuntas infracciones reportadas por los conductores.
Este incidente destaca la importancia de la transparencia y la legalidad en el uso de tecnologías de control de tráfico, así como la necesidad de abordar las preocupaciones legítimas de la comunidad en relación con estas herramientas.
