Giro inesperado en el caso de Daniel Sancho: Niega asesinato de Edwin Arrieta durante audiencia en Tailandia

En una vista judicial en Tailandia este lunes, Daniel Sancho, el español de 29 años acusado del asesinato de Edwin Arrieta, sorprendió al negar premeditadamente su culpabilidad en el crimen, a pesar de haberlo confesado anteriormente. Este cambio de declaración marca un giro significativo en el caso que ha capturado la atención de la opinión pública.

Sancho, quien ha estado en prisión provisional desde el 7 de agosto, asistió a una audiencia en la que se le leyeron los cargos que enfrenta, incluyendo asesinato premeditado, destrucción de documentación ajena, y ocultamiento de partes del cuerpo de la víctima. Aunque admitió su culpabilidad en algunos aspectos, rechazó la acusación de asesinato premeditado, argumentando que la muerte de Arrieta fue el resultado de un accidente.

Durante la audiencia, Sancho, por primera vez con un intérprete tailandés al español, insistió en que la muerte de Arrieta ocurrió de manera accidental durante una pelea. Sin embargo, el juez le recordó que la vista se centraba en aceptar o negar su culpabilidad, y no en ofrecer explicaciones detalladas sobre los eventos.

Este cambio de postura contrasta con la confesión inicial de Sancho ante la Policía de la isla de Phangan, donde admitió haber matado a Arrieta en una pelea el 2 de agosto y luego desmembrado y desechado el cuerpo.

Expertos legales sugieren que la declaración durante la audiencia es crucial y que la defensa probablemente argumentará que la muerte fue accidental durante una pelea, desafiando la versión inicial del crimen premeditado presentada por la Policía y el fiscal.

En cuanto a la defensa legal de Sancho, durante la audiencia el acusado decidió prescindir de su abogado de oficio y solicitó uno nuevo. Este cambio se suma a la serie de complicaciones legales que rodean al caso desde que el padre de Sancho prescindió de los servicios del primer abogado por “discrepancias en la defensa”.

El proceso judicial continúa, y el fiscal ahora tendrá la tarea de demostrar con pruebas que el asesinato fue premeditado. La fecha del juicio se ha fijado entre febrero y abril de 2024, y se espera que el caso continúe generando interés a medida que se desarrolla.