La Policía descubre pruebas de actividad delictiva continua
En un reciente allanamiento en la cárcel de Cómbita, Boyacá, donde se encuentra recluido el cabecilla de ‘Los Rastrojos-Costeños’, Ober Ricardo Martínez Gutiérrez, alias ‘Negro Ober’, la Policía desenterró evidencia de sus actividades delictivas que continúan desde su celda. A pesar de sucesivos traslados, ‘Negro Ober’ ha encontrado formas ingeniosas de extorsionar a sus víctimas, incluso dentro del sistema penitenciario.
A principios de septiembre, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) anunció el traslado de ‘Negro Ober’ a Cómbita. Sin embargo, el Gaula de la Policía descubrió un teléfono inalámbrico, propiedad exclusiva del centro penitenciario, que utilizaba para llevar a cabo sus extorsiones. Además, se encontró un detallado listado con información sobre sus víctimas, a quienes llamaba desde su celda.
El coronel Giovany Cristancho, al respecto, señaló: “Hay otras denuncias en su contra. Hacemos allanamientos, y a menudo no encontramos nada, pero sabemos que siguen haciendo llamadas. Estamos trabajando en estrecha colaboración con el Inpec para abordar este fenómeno”.
El Inpec, por su parte, ha mencionado que varios cabecillas de organizaciones delictivas y extorsionadores han solicitado traslados de prisión debido a las constantes requisas y el aislamiento en celdas frías. A esto se suma el dato alarmante de que más de 5,000 guardias penitenciarios están siendo investigados por presuntas acciones de corrupción.
A pesar de sus múltiples traslados entre cárceles en Caldas, Cauca, Santander y, finalmente, Cómbita, ‘Negro Ober’ continúa cometiendo delitos tras las rejas, lo que plantea desafíos significativos para las autoridades en la lucha contra la delincuencia organizada y la extorsión.
