Hombre que abusó, torturó y asesinó a un bebé en Bogotá escapa al Tapón del Darién y llega a Estados Unidos

Un aterrador caso de abuso, tortura y asesinato de un bebé en Bogotá ha conmocionado a la sociedad, ya que el presunto responsable logró escapar y alcanzar los Estados Unidos. La Fiscalía, en colaboración con las autoridades locales e internacionales, ha logrado presentar al acusado ante un juez de control de garantías por el delito de homicidio agravado.

El escalofriante suceso comenzó el 19 de enero, cuando un hospital del centro de Bogotá recibió a un bebé en estado crítico, supuestamente herido tras una caída según relataron sus familiares. Sin embargo, las lesiones eran de tal gravedad que el bebé falleció mientras recibía atención médica. La Fiscalía asumió el caso y el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses determinó que la causa de la muerte era maltrato infantil severo, evidenciando hematomas y heridas que no coincidían con una simple caída.

La investigación reveló que el padrastro del niño, presuntamente responsable de los abusos, había huido después de sentirse descubierto. Se cree que contactó a una red criminal y escapó por la peligrosa ruta del Tapón del Darién hacia Panamá, siguiendo la misma ruta utilizada por traficantes de migrantes. Interpol emitió una notificación azul en su contra, y después de tres meses de travesía por Centroamérica, se supo que el acusado ingresó ilegalmente a los Estados Unidos.

Los resultados de la necropsia fueron desgarradores, confirmando que las lesiones habían causado la muerte del bebé y que los padres intentaron encubrirlas como una simple caída. Según la Fiscalía, el acusado aparentemente no soportaba el llanto del niño y, en un ataque de violencia, le propinó patadas, utilizó un cable de cargador de celular para golpearlo en varias partes del cuerpo y le infligió múltiples formas de dolor y sufrimiento físico.

El trabajo conjunto de los investigadores del CTI, Migración Colombia y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI) permitió ubicar al presunto responsable en el centro de detención temporal de Eagle Pass, en Texas, desde donde fue deportado a Colombia.

A su llegada al aeropuerto El Dorado de Bogotá, el hombre fue arrestado y presentado ante un juez de control de garantías, donde se le imputaron los cargos de homicidio agravado, acceso carnal violento agravado y tortura agravada. A pesar de no aceptar los cargos iniciales, la contundencia del material probatorio y los detalles impactantes del caso llevaron al juez a entender la peligrosidad del acusado y la necesidad de mantenerlo en prisión preventiva. Este triste episodio se suma a la larga lista de crímenes atroces que sacuden a la sociedad colombiana.