En un giro inesperado, la Fiscalía General de la Nación ha presentado una apelación de 42 páginas ante el Tribunal Superior de Bogotá, en su intento por revertir un fallo que absolvió a la dueña de Servientrega y Efecty, Luz Mary Guerrero Hernández, y a otras cinco personas relacionadas con el controvertido escándalo de ‘Los Papeles de Panamá’.
El fallo de primera instancia, emitido por el juzgado quinto penal especializado de Bogotá, declaró inocentes a los acusados de los delitos de enriquecimiento ilícito de particulares, fraude procesal y lavado de activos. Además, decretó la prescripción de los delitos de falsedad ideológica en documento público, administración desleal y concierto para delinquir simple. Este veredicto también llevó a una compulsión de copias para investigar irregularidades y deficiencias en la presentación de pruebas en el proceso.
La apelación de la Fiscalía sostiene que existen pruebas sólidas que demuestran la supuesta implicación de Luz Mary Guerrero Hernández y los otros cinco investigados en operaciones ficticias con empresas fachada establecidas en paraísos fiscales por la firma de abogados panameña Mossack Fonseca. Estas operaciones habrían sido utilizadas para trasladar de manera irregular 4,5 millones de dólares al extranjero, disfrazando estas transacciones como falsas asesorías y consultorías.
Según la Fiscalía, se presentaron más de 30 correos electrónicos a lo largo del proceso que, presuntamente, revelan la red de irregularidades entre Mossack Fonseca y empresas colombianas. «Los implicados mantenían comunicaciones permanentes a través de correos electrónicos, llamadas e incluso se presentaron reuniones presenciales en Colombia y Panamá, por lo que tenían conocimiento claro y evidente de que dichos contratos y facturas eran contrarios a la realidad», señala la apelación de la Fiscalía.
La acusación también destaca que Mossack Fonseca presuntamente cobraba un porcentaje entre el 2,5% y el 4% del valor de las facturas utilizadas en las millonarias transacciones ilícitas. El escrito de acusación subraya que «en la compañía Mossack Fonseca se manipulaban tanto contratos como facturas, bajo la determinación de Juan Esteban Arellano Rumazo, desde Mossack Fonseca Colombia; a su vez, se efectuó la contratación con las off shore que por instrucciones dieron los clientes de Efectivo Ltda. y Circulante S.A».
Este martes 10 de octubre, la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá llevará a cabo una audiencia pública para determinar si acoge los argumentos de la Fiscalía y revoca el fallo de primera instancia, o si, por el contrario, mantiene la absolución de la dueña de Servientrega y Efecty, Luz Mary Guerrero Hernández, y las otras cinco personas involucradas en este escándalo de corrupción que ha captado la atención nacional.
Fuente: Sistema Integrado de Información Digital.
