Una mirada nostálgica a la historia de Juan Manuel Zambrano, un pilar de la comunidad local
En el corazón del pintoresco pueblo de El Piñón, Magdalena, la memoria de un hombre querido y respetado sigue viva en la comunidad. Juan Manuel Zambrano, conocido cariñosamente como “Ospina”, dejó una huella imborrable en la historia del lugar. Hoy, recordamos su legado y la emblemática tienda “La Trampa”, que marcó una época en este encantador rincón de Colombia.
Nacido como Juan Manuel Zambrano, “Ospina” era hijo de Máximo Zambrano Caballero y hermano por parte de padre de Ernestico Zambrano. Durante las décadas de los sesenta y setenta, “Ospina” se convirtió en un pilar de la comunidad local al establecer la tienda “La Trampa” en el Barrio Abajo.
“La Trampa” no era simplemente una tienda, era un lugar donde la comunidad se reunía, compartía historias y creaba recuerdos inolvidables. Ospina se dedicó a ofrecer una amplia gama de productos esenciales para los habitantes de El Piñón, convirtiéndose en un punto de referencia para las compras diarias.
Pero la tienda no era solo un lugar para comprar; también era un centro social donde los amigos se encontraban para disfrutar de partidas de billar, compartir conversaciones animadas y degustar algunas bebidas refrescantes en un ambiente amigable. La cantina de “La Trampa” era famosa por su hospitalidad y el sentido de comunidad que Ospina cultivó allí.
Hoy en día, la tienda “La Trampa” ya no existe, pero su legado perdura en los corazones de aquellos que vivieron esos tiempos. La comunidad de El Piñón recuerda a “Ospina” con cariño y gratitud por su contribución a la vida cotidiana del pueblo.
Aunque Ospina ya no está físicamente entre nosotros, su espíritu y la memoria de “La Trampa” siguen siendo un recordatorio de la importancia de la comunidad y la conexión entre sus miembros. Hoy, en El Piñón, se celebra la vida y el legado de “Ospina”, un hombre que hizo de su tienda un lugar especial en la historia de este hermoso pueblo costero.
Para conmemorar este legado, la comunidad planea organizar un evento especial en honor a “Ospina” y “La Trampa” en las próximas semanas. Todos están invitados a unirse a esta celebración y compartir sus recuerdos y anécdotas sobre este icónico establecimiento y su dueño.
“Ospina” y “La Trampa” pueden haber desaparecido físicamente, pero su influencia y recuerdo perdurarán en El Piñón para siempre. La comunidad continúa honrando la memoria de un hombre cuya dedicación y espíritu comunitario dejaron una huella imborrable en el corazón de este encantador pueblo costero.
Para obtener más información sobre el evento conmemorativo o para compartir sus propios recuerdos sobre “Ospina” y “La Trampa”, comuníquese con la Oficina de Cultura y Patrimonio de El Piñón.
