Anif advierte sobre el impacto fiscal y la posibilidad de aumentar el IVA debido al subsidio de gasolina a taxistas.
El constante incremento en el precio de la gasolina en Colombia generó un profundo debate en todo el país, suscitando la preocupación de numerosos conductores que se sienten afectados por la escalada mensual en los costos del combustible. Por este motivo, y como una forma de solucionar la problemática, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), presentó como propuesta el cobro de subsidio de gasolina a taxistas.
En esta situación de alza de precios, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha sido un protagonista clave en este contexto. En múltiples ocasiones ha anunciado que se espera que el precio de la gasolina alcance los $16,000 al finalizar el año.
Como contexto a la propuesta de Anif, es importante recordar que en respuesta a las intensas protestas que sacudieron al país el pasado mes de agosto, el Gobierno Nacional tomó la decisión de otorgar un subsidio a los taxistas para aliviar sus gastos relacionados con el combustible hasta el final del año.
Conforme a lo establecido en el acuerdo, el subsidio se pagará al término de cada mes y se estima que su costo total será de 74,300 millones de pesos para el resto del año. Sin embargo, este dinero deberá ser financiado por los ciudadanos a través de impuestos.
La propuesta de Anif: Cobrar el subsidio de gasolina a taxistas
Ante esta situación, la Anif recientemente presentó una polémica propuesta: cobrar el subsidio de gasolina a taxistas, el cual saldrá directamente de los usuarios de este servicio, a través de un aumento en las tarifas de las carreras.
Según un informe de Anif, «las personas que más usan el taxi como medio de transporte, al menos para dirigirse a sus lugares de trabajo, son las de mayores ingresos.» Esta afirmación desató un encendido debate sobre la equidad de la medida.
Además, la Anif respaldó su propuesta argumentando que más del 70% de las personas que utilizan este servicio, se encuentran en los estratos de la sociedad con mayores ingresos. Además, la entidad comparó las tarifas de taxi en Colombia con las de países como Perú, Chile y Uruguay, señalando que el país tiene una de las tarifas más bajas en la región.
Hasta la fecha, el Gobierno ha desembolsado aproximadamente $17,500 millones en septiembre para el subsidio de la gasolina de los taxistas. Se estima que este monto aumentará a $18,200 millones en octubre, debido a un ajuste de $600 pesos en el precio del combustible.
Por otro lado, Anif advirtió que, si el subsidio se mantiene el próximo año, el costo total ascendería a 237,000 millones de pesos. Esto plantea interrogantes sobre el impacto fiscal a largo plazo y la necesidad de encontrar soluciones sostenibles para mantener el equilibrio en las finanzas públicas.
Incertidumbre sobre el futuro de los combustibles
En medio de estas discusiones, el centro de estudios Anif expresó su preocupación por el futuro del ACPM (Aceite Combustible Para Motores), el otro combustible ampliamente utilizado en Colombia.
Conforme a lo destacado, si no se cumplen los compromisos en términos de aumentos en los combustibles, las metas de reducción del déficit fiscal podrían quedar en entredicho. Esto podría llevar a la necesidad de considerar medidas alternativas, como el aumento de la tasa del IVA hasta el 25 por ciento, para abordar la deuda acumulada por el país al mantener los precios de los combustibles en niveles bajos.
La propuesta de Anif y las medidas gubernamentales para aliviar el costo de la gasolina a los taxistas, continúan siendo temas de gran relevancia en la agenda pública de Colombia, desatando debates sobre equidad, sostenibilidad fiscal y el futuro de los precios de los combustibles en el país.
