Gaviria señala como ilegítima la reforma a la salud y esta fracasará si es aprobada.
Así se vivió una de las jornadas con más tensionantes dentro de la discusión de la reforma de salud en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, corporación que deberá decidir si finalmente se desenredará la iniciativa.
Por ahora se conoce que han sido aprobados solo tres artículos que no generan mayores reparos, no obstante, lo más importante aún no ha sido discutido ni votado.
En medio del debate, Alejandro Gaviria, exministro de Salud, se refirió al tema afirmando que en efecto, este proceso de la reforma al sector “va mal”, “Este proceso en mi opinión va mal en la forma y en el fondo estamos lejos de los consensos, el trámite ha sido muy accidentado, el texto es incompleto, incoherente, pero sobre todo empieza a ser percibido como una imposición caprichosa”, dijo Gaviria.
“Ilegitimo el sector de la salud”: Alejandro Gaviria
Asimismo manifestó que ve como ilegítimo el sector de la salud y demás actores del sistema. “Sin legitimidad diga lo que diga la ley, va hacer imposible llegar a los acuerdos necesarios para la inclusión de algunas tecnologías, para lidiar con las discusiones éticas de las instituciones previstas en la ley estatutaria”, puntualizó, señalando igualmente que las grandes mayorías de las leyes ilegítimas son ineficaces, enfatizando en que esta reforma la esté dando precisamente un gobierno izquierdista, “A veces lo dijo con sinceridad e ironía, pero me cuesta creer que esta sea una reforma de un gobierno que se dice de izquierda, esta reforma terminará en sus sistema mucho más segregado con las clases medias y altas con seguros de salud, y unos pobres en un sistema público desbordado, sujeto a las afugias burocráticas de una Adres”, señaló.
Finalmente reitero Alejandro Gaviria que una reforma sin consenso y legitimidad fracasará así la lleguen a aprobar.
“Producirá más calor que luz, ojalá el congreso y el Gobierno hicieran un alto en el camino, para lograr un acuerdo más amplio y presentarán un nuevo proyecto legítimo esta vez sin vicios y sin atropellamientos con el objetivo de mejorar la salud y no de ganar una batalla política”, concluyó el exministro de salud.
