Arquidiócesis de Barranquilla realiza donaciones a emprendimientos de pospenadas de el Buen Pastor

Hace parte del programa de reinserción social y laboral de esta población que adelanta la Fundación Esperanza-Tejiendo hilos de fe.

La Arquidiócesis de Barranquilla en alianza con la Fundación Esperanza -Tejiendo hilos de fe entregaron insumos de producción para unidades de negocio y emprendimientos a un primer grupo de 12 pospenadas del Centro de Rehabilitación El Buen Pastor de Barranquilla.

El programa vincula en total a 40 pospenadas que recibirán el beneficio en diferentes etapas.

La donación, realizada por el Arzobispo, Monseñor Pablo Emilio Salas en la Iglesia La Transfiguración del barrio Miramar, surge del seguimiento de los programas que adelanta la Fundación Esperanza orientados a la resocialización a internas y reinserción de pospenadas. La donación representada en carros de comida rápida, refrigeradores, vitrinas exhibidoras, asadores, bicicletas, máquinas de coser y unidades de peluquería son resultado de un estudio de caracterización de esta comunidad que realizó la fundación para garantizar su vida productiva después de cumplir sus castigos.

La vinculación de la Arquidiócesis de Barranquilla en esta obra social es fundamental en el proceso que se construye desde el interior de estos centros, que buscan, con el apalancamiento del recurso, generar fuentes de ayuda y asistencia a las necesidades de las pospenadas desde su reinserción social y laboral.

El programa de atención de las pospenadas denominado ‘Esperanza siembra Esperanza, unidas por emprender’ inició con el entrenamiento y adquisición de competencias técnicas de las internas dentro del centro de rehabilitación, la certificación para su fortalecimiento técnico y posteriormente, la entrega del recurso o apalancamiento para el Fortalecimiento de las unidades productivas”, explicó Claudia Quintero, directora de la Fundación Esperanza.

El estudio de caracterización del perfil de la población de pospenadas (mayo, 2022) muestra a mujeres entre los 35 y 56 años.

El 91 por ciento de esta población reconoce que después de salir del Centro de rehabilitación El Buen Pastor desarrolla trabajos informales. El total de mujeres caracterizadas responde que en el hogar solo el 45% labora una sola persona adulta. El 64% de estas mujeres dice que sus ingresos quincenales no supera los quinientos mil pesos.