Con gran preocupación cientos de trabajadores hoteleros del centro histórico de Cartagena se ven perjudicados como consecuencia de los excesos de la rumba nocturna, situación que los amenaza a muchos de los establecimientos formales de hotelería a tener que cerrar sus puertas, buscando nuevos horizontes en otras ciudades del interior del país o del Caribe.
El comercio de propios y foráneos donde dueños de bares, cantinas, reservados, tabernas y fumaderos del Centro histórico de Cartagena, vienen desde hace mucho tiempo bloqueando y paralizando la ciudad cuando así les plazca, acabando con la tranquilidad de aquellos turistas que preferían a esa ciudad y centro histórico por hallar allí un lugar tranquilo ideal para descansar y dejar atrás por un tiempo los ruidos y afanes de sus sitios de origen, situación que hoy día ha cambiado a falta de autoridad, pues el gremio hotelero se limita a ver con tristeza cómo sus huéspedes buscando nuevas opciones que llenen sus expectativas para descansar lejos de ruido y el estrés, abandonan los hoteles, hostales y pensiones en busca de lugares que se amolden a sus pretensiones distintas al hostigamiento de prostitutas, jibaros, atracadores, ruseros, pseudo cantantes callejeros acompañados de ruidosos escándalos de toda la noche hasta el amanecer.
Es por esto que muchos administradores y propietarios de estos establecimientos se han agremiado con el Grupo Hoteles del Centro para manifestar y apoya las medidas tomadas por la administración distrital de decretar límites a la rumba al definir horarios compatibles con la actividad hotelera, ello, permite que se establezca la noche respetuosa, que a su vez, brinda descanso digno a huéspedes y turistas en planes familiares, culturales, negocios, convenciones y disfrute del patrimonio histórico que potencia a Cartagena como un destino de turismo sano.
Contaminación desmedida y sin control en el Centro Histórico
Serios problemas se evidencian en este importante sector de la heroica como consecuencia de la contaminación auditiva proveniente de discotecas, asimismo, la economía informal que ocupa el espacio público con altos parlantes y artistas callejeros; lo que lleva una variedad empalagosa de entretenimiento para adultos se convierten por sí sola en una grave amenaza para un sector generador de empleo que legalmente cumple con el tributo de impuestos en la ciudad.
El descanso en un sueño perdido
Para recuperar energías y salir del estrés en un ambiente sano, los huéspedes exigen que no tienen ningún interés en la rumba y las actividades del entretenimiento nocturno para adultos, y que, además, desvalorizan al destino turístico con las actividades de explotación sexual de adultos y menores, la prostitución en espacio público y el microtráfico.
Las zonas del Centro Histórico de Cartagena donde mayormente se concentran el entretenimiento nocturno son la Plaza de los Coches; las calles: el Colegio, el Porvenir y la Primera de Badillo.
primordial servicio ofertado para las empresas hoteleras, situación acorde a los gustos buscados por sus clientes (los turistas)., quienes exigen a los huéspedes que no tienen ningún interés en la rumba y las actividades del entretenimiento nocturno para adultos, y que, además, desvalorizan al destino turístico con las actividades de explotación sexual de adultos y menores, la prostitución en espacio público y el microtráfico.
Las zonas del Centro Histórico de Cartagena donde mayormente se concentran el entretenimiento nocturno son la Plaza de los Coches; las calles: el Colegio, el Porvenir y la Primera de Badillo.
Y en esos mismos lugares, también, prolifera la inseguridad, el acoso y la indigencia.
Imagen muy negativa para el destino de turismo patrimonial que tiene la ciudad a nivel internacional.
El turismo familiar se siente excluido por las actividades de entretenimiento nocturno para adultos, el nuevo gremio pide a las autoridades locales que definan políticas públicas que permitan el regreso de los turistas adecuados para la zona patrimonial.
Considera el gremio que ese sector ha realizado inversiones importantes en la industria turística formal, legal y sana, y con ello, han generado ingresos y empleo para Cartagena.
De continuar este panorama contrario a su razón de ser empresarial, se perdería ese aporte para el desarrollo y progreso de la gente en la ciudad.
Por último, el Grupo Hoteles del Centro, observa con mucha preocupación la permanencia de Cartagena en la lista de ciudades Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad, título otorgado por la UNESCO hace más de 40 años; y de no poner freno las autoridades a las actividades incompatibles con esa distinción internacional, y finalmente, la Heroica quedaría por fuera de esa categoría, la industria hotelera sería la primera en cerrar en el Centro Histórico.
