El entramado de corrupción para quedarse con el 12% de los recursos del Ocad-Paz

Mandatarios locales, contratistas, congresistas y la Contraloría General, crearían un entramado de corrupción para quedarse con aproximadamente el 12 % de los recursos que aprueba el Ocad-Paz, mientras Luis Alberto Rodríguez estuvo al frente de la Dirección Nacional de Planeación.

Ocad-Paz es el órgano del Sistema General de Regalías que prioriza y designa al ejecutor de los proyectos que buscan beneficiar a municipios que, a raíz del acuerdo de paz, se incluyeron en los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial, Pdet, por ser los más pobres y afectados por el conflicto. Solo entre junio y diciembre de 2021, cuando se dio vía libre a 355 proyectos, las coimas habrían podido ascender a 500.000 millones de pesos.

Sobre esta situación hay varias quejas y denuncias ante la Fiscalía, la Procuraduría, la Contraloría, la Dirección Nacional de Planeación y ante el entonces consejero presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, quien presidía el Ocad-Paz.

En un correo recibido por el consejero con el asunto: “Dolor de patria por los municipios Pdet”, se afirma que senadores, la Contraloría y el DNP, “están extorsionando a los municipios azotados por la violencia para que paguen por los proyectos para que (…) Les den el ok”.

Todo este entramado de corrupción se pudo dar después de la reforma de la Ley de Regalías, donde se habilitó a las entidades mixtas, que no tienen la obligación de licitar, para ejecutar proyectos financiados con recursos del Ocad-Paz, así mismo la reforma de la Contraloría que en 2020 le asignó a este ente facultades para hacer control previo.

La bolsa de recursos del Ocad-Paz es limitada, proviene del 7 % de las regalías y, por su diseño, pone a competir a los 170 municipios Pdet para obtener la financiación de sus proyectos. Tampoco existe un tope legal para el número de iniciativas o de presupuesto, que se puede aprobar a una región, pero la ley señala que el Ocad debe distribuir los recursos con equidad en los distintos territorios y en los diferentes pilares.

OCAD PAZ, una feria de más de $500 mil millones de recursos de regalías, para los peces gordos del departamento del Cesar.

La Procuraduría está alertando sobre la manera en que mandatarios locales y contratistas habrían creado un entramado de corrupción para quedarse con aproximadamente el 12 % de los recursos que aprueba el Ocad-Paz.

¿Qué son los Ocad Paz? De acuerdo con lo que está descrito en la página web, el Ocad Paz el órgano del Sistema General de Regalías (SGR) que se responsabiliza de viabilizar, priorizar y aprobar proyectos de inversión financiados con recursos de regalías. Esta entidad es responsable de designar la entidad pública ejecutora de dichos proyectos y la instancia encargada de contratar la interventoría del mismo.

Tanto la Fiscalía, la Procuraduría, la Contraloría, y la Dirección Nacional de Planeación tienen sus ojos puestos en este entramado de corrupción facilitado por la reforma de la Ley de Regalías, donde se habilitó a las entidades mixtas, que no tienen la obligación de licitar, para ejecutar proyectos financiados con recursos del Ocad-Paz.

Según la investigación, si se mira la cantidad de dinero adjudicado por departamento, entre 2019 y 2022, el Cesar recibió $652.852 millones de pesos. Según varios testimonios, esto fue posible gracias a los favores recibidos por políticos y funcionarios con trayectoria en esa zona del país, entre ellos los congresistas del partido Conservador, como Alfredo Ape Cuello, el exdirector del DNP, Luis Alberto Rodríguez, y Anibal Quiroz, de la Contraloría.

En otros casos, se conoció que proyectos de Putumayo, Antioquia, Córdoba, Risaralda, Casanare, Sucre, Cundinamarca, Arauca, Magdalena, Santander, Nariño, Boyacá y otras zonas, fueron aprobados sin cumplir con la totalidad de los requisitos y, en otros casos, las certificaciones se expidieron seis meses después de que se les hubiera dado vía libre, por lo que se concluye que certificó cuando el hecho ya estaba cumplido.