Mediante un comunicado a la opinión pública, el grupo subversivo negó el secuestro al igual que nunca se han comunicado con el ingeniero Hernández para exigir dinero por el rescate, toda vez que nunca la secuestraron.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN) a través de un comunicado a la opinión pública que emitieron el 8 de junio, niegan rotundamente el secuestro de Juliana Hernández Oliveros hija del hoy candidato presidencial Rodolfo Hernández.
Lo anterior surge a raíz de una declaración de Rodolfo Hernández, quien aseguró que hace 18 años su hija habría sido raptada y posteriormente asesinada por el ELN, sin embargo, hoy el grupo subversivo niega la responsabilidad del hecho, pues nunca la secuestraron.
“Después de hacer las indagaciones respectivas, le informamos al país que nunca tuvimos retenida a Juliana Hernández Olivero, hija adoptiva de Rodolfo Hernández. Ninguna de nuestras estructuras en la región tiene responsabilidad directa ni indirecta en este caso, es falso que ella hubiese desaparecido o muerto en manos del ELN”, se lee en el comnicado del ELN.
Entre tanto, el candidato presidencial Rodolfo Hernández, se le ha escuchado decir que su hija en junio de 2004 tenía 23 años, como también que era la única mujer de cuatro hermanos, y adelantaba estudios de derecho en la Universidad Santo Tomás de Bogotá, de donde aprovechó unas vacaciones intersemestrales, para visitar a su familia en el Santander, ocurriendo la trágica noticia refiere el ingeniero Hernández, cuando dice que una amiga la había invitado a pasar una temporada en una finca en Ocaña (Santander), donde tenía intensas operaciones el ELN. Juliana llegó al municipio el 4 de junio y hasta la fecha no se volvió a saber de su paradero.
“En el 2004 -mi hija- estaba estudiando derecho y resolvió, con una amiga, irla a acompañar a Ocaña, allá al Catatumbo. Y allá, tal vez, nunca supimos la verdad, pero la cogió el Ejército de Liberación Nacional y empezó a chantajearme”, precisa Hernández.
Al respecto, asegura Rodolfo Hernández que el grupo subversivo del ELN le estaba exigiendo dinero para liberar a la joven, lo que niega totalmente la estructura del ELN. En su comunicado, dice que no solicitó un rescate porque no sabía nada de Juliana. No descartan que los haya suplantado una banda criminal.
“Nunca nos comunicamos con Rodolfo Hernández para solicitar dinero por su liberación porque ella no estaba con nosotros, ni teníamos informaciones al respecto. No descartamos que alguna banda en complicidad con los organismos de inteligencia, como ha ocurrido en otras ocasiones, se haya comunicado utilizando el nombre del ELN para exigir dinero por su liberación”, dijo el grupo subversivo.
Es de aclarar que ni Rodolfo Hernández como su familia, no pagaron el rescate, motivo por el cual según dicen ellos, asesinaron a Juliana. No obstante, Rodolfo Hernández antes del secuestro de su hija, estuvo retenido forzosamente por las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), donde los subversivos le exigieron $50 millones de pesos por el rescate, pero él pagó $15 millones, quedando pendiente $35 millones que posteriormente se negó a entregar, “Les quedé debiendo 35 (millones) y entonces me empezaron a acosar para que pagara los 35. Les dije: yo no puedo pagar los 35 porque ustedes le pusieron una bomba a una urbanización y se quebraron todos los vidrios”, expresó el aspirante presidencial.
Finalmente, el ingeniero Rodolfo Hernández y su esposa Socorro como el resto de familiares se reunieron para ver que hacían, acordando no entregar el dinero exigido, dando a entender que estaban atentando contra todos sus familiares y que si no le ponía un alto esa situación no se detendría.
“Hicimos una reunión de familia: ‘¿Qué hacemos?’, y mi mamá me dijo: ‘no pague, vamos a ver qué pasa’, y la mataron”, sostiene Hernández.
Por todo esto, el hoy candidato a la presidencia Rodolfo Hernández asegura que se permitió vivir el duelo y aceptar como probable que su hija no esté con vida. Sin embargo, su estado oficial sigue siendo desaparecida porque tras más de una década del secuestro no se supo más de su paradero.
