Rusia advirtió sobre el riesgo “real” de una Tercera Guerra Mundial

El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, aseguró que mantendrán las conversaciones con Ucrania, pero acusó a Zelenski de “aparentar” que negocia.

Rusia advirtió sobre el riesgo “real” de una Tercera Guerra Mundial después de que altos responsables estadounidenses visitaran Ucrania y aseguraran que podía ganar el conflicto con el “equipamiento adecuado”.

Ante las sanciones sin precedentes contra Moscú de los países occidentales y su creciente apoyo militar a Ucrania, el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, alertó que “el peligro (de una guerra mundial) es grave, es real, no se puede subestimar”.

Lavrov también acusó al presidente ucraniano Volodimir Zelenski de “aparentar” que negocia.

“Es un buen actor, si se observa con atención y se lee con cuidado lo que dice, se encontrarán miles de contradicciones”, indicó.

Y agregó: “La buena voluntad tiene límites. Y si no es recíproca, no contribuye al proceso de negociaciones. Pero seguiremos manteniendo negociaciones con el equipo enviado por Zelenski”.

Desde el inicio de la guerra, hace ya más de dos meses, Zelenski ha pedido incesantemente a sus aliados occidentales armamentos pesados para poder contrarrestar la superioridad militar de Rusia.

Los llamamientos parecen tener eco. Varios países de la OTAN se han comprometido en los últimos días a proporcionar armas y equipos a Ucrania, pese a la protesta de Moscú.

Este creciente apoyo se evidenció con la visita el domingo a Kiev de dos altos responsables estadounidenses, el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, y el secretario de Estado, Antony Blinken, que se reunieron durante tres horas con el presidente de Ucrania.

“La primera cosa para ganar es creer que se puede ganar. Y ellos están convencidos que pueden ganar”, señaló Austin a periodistas después del encuentro. “Pueden ganar si tienen buenos equipamientos, el apoyo adecuado”, añadió.

En un discurso vespertino, Zelenski estimó que la victoria ucraniana era cuestión de tiempo y afirmó que “gracias a la valentía” de su pueblo, Ucrania “es un verdadero símbolo de la lucha por la libertad”.

Durante la visita, Austin y Blinken anunciaron el envío de 700 millones de dólares adicionales en ayuda militar, llevando hasta 3.400 millones de dólares la aportación total de Estados Unidos.