“perdón social”: ¿La excusa de Petro para buscar votos en cárceles?

Lluvia de críticas y cuestionamientos caen sobre el candidato presidencial Gustavo Petro, quien empezó a entablar relaciones políticas en cárceles con personajes condenados por corrupción.

En esta oportunidad se conoció que lo hizo el pasado fin de semana en la cárcel La Picota, en el sur de Bogotá,hasta donde llegó su hermano Juan Fernando Petro como posible emisario según algunos críticos.

A este hecho, el Senador Jorge Enrique Robledo le salió al pasó y escribió en su cuenta personal de Twitter; “Gravísimo error el de @petrogustavo al irse a las cárceles a conseguir votos entre dirigentes políticos condenados. El peor mensaje que se le puede enviar a Colombia, en especial a los jóvenes, es que todo vale. Así se le ha hecho un gran daño al país!!!”.

Mucho especulan diciendo que el hermano del candidato Petro tenía como misión, hablar con el exsenador Iván Moreno Rojas, condenado a 14 años por el saqueo a Bogotá que protagonizó su hermano, el condenado exalcalde Samuel Moreno Rojas.

Tratando de sacar provecho Gustavo Petro, intentó estirar sus alcances hasta ese centro penitenciario con el argumento de ofrecerle “perdón social” a varios viejos conocidos de la política nacional que, además de sus condenas por corrupción, tienen por ofrecer su experiencia electoral.

Cabe destacar que el pasado lunes, el mismo Gustavo Petro confirmó la visita de su hermano a La Picota y aseguró que se reunió con Moreno Rojas, quien estaría en búsqueda de un acuerdo de perdón, sin especificar cómo se vería beneficiado.

Sin embargo, Petro habló unicamente de la reunión con el condenado exsenador, por otra parte, aseguran sus contradictores a que su hermano también se reunió con políticos corruptos que están tras las rejas como Manuel Carebilla (exgobernador de Amazonas), Jimmy Díaz Burbano (exgobernador de Putumayo), Óscar Rodríguez y Javier Zapata (exgobernadores de Guainía), entre otros.

Muchas han sido las suspicacias en el uribismo debido a que Petro ha hecho política en las últimas semanas ofreciendo un “perdón social”, dentro de los cuales estaría incluido el expresidente Álvaro Uribe, el Eln y ahora a políticos corruptos.

Por su parte, el expresdicente Álvaro Uribe cuestionó en Twitter si el candidato busca el apoyo electoral de corruptos a cambio de beneficios judiciales.

Asimismo, el candidato del Pacto Histórico denunció en redes sociales que se “confecciona un plan desde las cárceles” para presuntamente infiltrar dineros del narcotráfico a su campaña presidencial.

(Juan Fernando Petro) estaba hablando con Iván Moreno (…) él no es narco, no es parapolítico, fue corrupto. Él está en un proceso muy interesante desde el punto de vista personal. Lo que Moreno nos ha sugerido es ser constructor de algo que he propuesto que se llama el perdón social y eso se está discutiendo dentro de las cárceles”, dijo Petro.

Petro reconoce su interés en hablar con el hermano del exalcalde de Bogotá, condenado por el carrusel de la contratación en la capital; sin embargo, no aclaró cuál es el acuerdo que busca.

El hermano de Petro le respondió a Uribe sostiendo que no se trató de una búsqueda por un acuerdo electoral. “Ni pidiendo votos, ni dinero, estaba en una agenda de paz. ¿Por qué le tiene tanto miedo y odio a la paz?”. Esto, pese a que el hermano de Gustavo Petro negó que estuviera en búsqueda de un acuerdo electoral en La Picota, esta muestra de disposición de diálogo ha dado de qué hablar, pues ese relacionamiento se da en plena contienda electoral y con personajes que tienen amplio conocimiento de cómo conseguir votos.

Sobre lo ocurrido, Gustavo Petro planteó que él denunció a los hermanos Moreno Rojas por el carrusel de la contratación, pero Iván Moreno lo señaló el 2014 de tener intereses con el grupo Nule, protagonista del corrupto carrusel de obras en Bogotá, porque su concuñado Carlos Gutiérrez Robayo hizo negocios con esa firma por más de $30.000 millones.

LO único cierto con todo esto, es que el candidato presidencial por el Pacto Histórico, Gustavo Petro y Moreno Rojas, tiene la atención prestada con lupa en el “perdón social” al que insiste el candidato, y que sigue sin aclara cuál será la exigencia que le haría a los corruptos condenados a cambio de “perdonarlos” en caso de ganar las presidenciales.